El equipo de gobierno del PP en el Ayuntamiento de Priego se ha cansado de los comportamientos incívicos en algunos espacios púbicos de la ciudad y ha anunciado mano dura y sanciones hasta el máximo de lo permitido para frenar esta situación, que consideran que está perjudicando la imagen del municipio. El vandalismo, beber en la calle y los restos orgánicos de perros que se dejan en el suelo sin recoger serán las acciones que se perseguirán estrechamente desde el Consistorio. "Aquella persona que actúe de forma incívica será multada con la denuncia máxima que permita la normativa", anunció ayer el concejal de Infraestructuras, Antonio Barrientos (PP), acompañado de la alcaldesa prieguense, María Luisa Ceballos (PP).

El edil no ocultó su descontento ante el estado que presentan varios jardines del municipio de Priego, aunque el detonante que ha llevado a tomar estas medidas han sido las últimas pintadas halladas en el parque del Paseo de Colombia, donde tanto la estatua de la Defensa de Zaragoza como varias pérgolas ubicadas en el mismo, como avanzó El Día, han resultado dañadas con una especie de tinta negra "que no se va y que tendremos que tratar para poder borrar". Barrientos añadió que resulta "vergonzoso" la basura, los excrementos de animales "y principalmente que la gente estropee los jardines que tanto trabajo y dinero nos cuesta mantener", recalcó. El concejal anunció que se van a ampliar la medidas de seguridad por parte de la Policía Local, para que los ciudadanos entiendan que quien no respete las normas de convivencia será sancionado. Barrientos hizo un llamamientos a los ciudadanos para que "respete los jardines" y "no destroce por destrozar, porque esta situación es extrema". Finalmente informó que como se ya se anuncio desde hace unos meses, en el municipio queda prohibido pasear por los jardines con los perros sueltos y más aún no recoger sus defecaciones. En ambos casos la infracción estará considerada como leve o grave, dependiendo del caso, y con una multa de entre 60 euros a 200 euros. Estas normativas de control animal llevan unos meses en funcionamiento y su fin es mantener los recintos públicos limpios.

Mientras, la alcaldesa manifestó que "hay que hacer un llamamiento general a la ciudadanía de Priego para que denuncien cualquier actividad incívica", ya que "esto es cosa de todos y a veces la Policía no da abasto". Ceballos informó además que el pasado martes se puso en contacto con el subdelegado de Gobierno, Juan José Primo Jurado, para que autorice la activación de las cámaras de seguridad las 24 horas en algunos puntos de la ciudad, para que "todo el mundo sepa que se van a grabar aquellos espacios más sensibles y que no se va a dejar pasar ningún tipo de actuación de esta importancia".

En relación con el tema del botellón, la alcaldesa añadió que se van a aplicar medidas más contundentes "con visitas y vigilancia más continuas en esta zona, para erradicar dicho problema". Ceballos recalcó que de forma continua se están multando a todas aquellas personas que no cumplen con la medida y beben en la calle, "pero no damos abasto del movimiento que hay". Añadió que en algunos casos los agentes de la Policía Local han tramitado multas de hasta 300 euros por beber en zonas en las que no estaba permitido.