Javier Ruibal regresa a Córdoba para realizar esta noche (sala Golden Club, 21:00), solo con su guitarra, un recorrido por sus 35 años de trayectoria en la música, que han quedado resumidos en un doble CD + doble DVD recientemente publicado. "Han pasado volando", señala el artista, que incluirá en el concierto algunas canciones nuevas que formarán parte de su próximo álbum.

El gaditano subraya la importancia que para un artista supone "sentirse acompañado, si bien siempre hay dificultades para ciertas músicas, y saber que hay destinatarios para lo que uno compone". Y reivindica la libertad como la clave "para poder mantenerse en cualquier profesión y sacar fruto de la imaginación y el deseo; no hay más remedio que estar satisfecho con lo que se hace pero poniendo la ilusión igual desde el primer día y cada vez que se empieza".

Ruibal debutó discográficamente en 1983 con Duna, un disco que incluía, entre otras piezas, Al amor y Testamento. Una década en la que publicó también Cuerpo celeste (1986, con Guadalquivir, Manuela...) y La piel de Sara (1989, con La rosa azul de Alejandría, Agualuna, Bendito veneno...). En los 90 presenta Pensión Triana (1994, Y la noche afuera, La gloria de Manhattan...) y Contrabando (1997, Un ave del paraíso, Por tu amor me duele el aire...) y en la década siguiente Las damas primero (2001, Aurora, Isla Mujeres, Guárdame...), Sahara (2003, recopilación de temas que lo lleva a diversas partes del mundo) y Lo que me dice tu boca (2007, Habana mía, Tu nombre, Para llevarte a vivir...). En 2010 sacó una edición especial de Pensión Triana, en 2011 el recopilatorio Sueño, grabado junto a la Orquesta de Córdoba en el Gran Teatro y el Teatro Falla de Cádiz, y en 2013 Quédate conmigo (Cine Macario, El niño del Serengueti...), con el que estrena su sello Lo Suyo Producciones.

"Creo que lo fundamental es que lo que hacemos está destinado a mantener el público que nos regala su presencia, entregarle un rato de emoción, un poco de diversión y un puntito de reflexión. Luego cada uno vuelve a su vida rutinaria. Nosotros también la tenemos, aunque es realmente bonita", señala el artista, que considera que en estos 35 años el escenario musical/discográfico "no ha cambiado mucho". A partir del fenómeno de los Beatles, anota, "el panorama de publicaciones musicales se dividió en dos: la música-acontecimiento, que no profundiza en que la música vaya evolucionando sino en la cuenta corriente, y otras músicas, que tienen que ver con el criterio de cada músico y su búsqueda particular de algo más sentido o más profundo, y eso no ha variado, lo que sí pasa es que ahora hay menos afecto del público en general por las publicaciones discográficas y las otras músicas que no son acontecimiento padecen más dificultades para salir adelante".

Ruibal considera que su público ha ido evolucionando "como evoluciona todo público que busca otras cosas: se es más selectivo con los años". Y confiesa su buena relación con sus canciones más antiguas: "Trato de escribirlas de manera que no me caduquen. Algunas las canto con más frecuencia y otras no, pero a veces me piden una del primer disco y la canto gustosamente. No han envejecido mal; igual yo he envejecido peor que mis canciones".

La antología de su 35º aniversario fue grabada a lo largo de cuatro noches en Cádiz con más de 30 invitados, entre ellos Dorantes, Martirio, Jorge Drexler, Jorge Pardo y Pasión Vega: "La idea era que lo pasáramos bien todos, hacer una fiesta íntima y particular entre las murallas históricas de Cádiz". Aquí se incluyen ya temas inéditos que estarán en el próximo álbum, que saldrá a la venta en principio el próximo año, si bien Ruibal trabaja sin prisas: "Ahora ocurre que hay que entregar cosas cada vez con menos tiempo entre una y otra, estamos sometidos a una especie de obsolescencia programada por la velocidad de los tiempos... A mí no me quema retrasarme unos meses o un año, lo que sí resulta importante es recordarle al público que no te has retirado, simplemente has retrocedido unos pasos para componer".

En las próximas semanas Ruibal ofrecerá varios conciertos en Galicia, Barcelona y Andalucía, "y además me voy a hacer un viajecito de dos semanas, que me viene muy bien ir a cualquier sitio sin tirar de la guitarra".