acontecimiento Del 21 al 29 de abril en el bulevar del Gran Capitán

La Feria del Libro explora la geografía literaria cordobesa

  • Los escritores locales protagonizan una programación que también incorpora a Santiago Posteguillo, Clara Sánchez y Javier Gomá · Hay 75 actividades previstas

El tercer capítulo del ciclo temático que la Feria del Libro inició hace dos años es, después de la novela negra y la histórica, Córdoba. Los autores locales (junto a foráneos como Clara Sánchez, Santiago Posteguillo, Fernando Delgado, Javier Gomá, Nuria Barrios y María Iglesias) protagonizarán un encuentro que se celebrará del 21 al 29 de abril en el bulevar del Gran Capitán, con 40 casetas y 75 actividades, sin carpa infantil y con un cierto aire de feria de transición hacia el modelo algo más evolucionado que la Delegación de Cultura del Ayuntamiento quiere implantar en los próximos años. Y es que, con Cosmopoética desplazada al otoño, la Feria del Libro recupera su condición de principal acontecimiento cultural de la primavera.

Diecinueve librerías y 16 editoriales (ocho de ellas, locales) participan en la 39ª edición de la Feria, que será inaugurada por Juana Castro (el sábado a partir de las 20:00) y que distribuye sus actividades en cuatro apartados principales: presentaciones de libros, firmas, encuentros con autores y propuestas infantiles. Habrá también exposiciones y mesas redondas y una participación activa de los clubes de lectura de la provincia.

La Feria del Libro, recordó ayer el concejal de Cultura del Ayuntamiento, Juan Miguel Moreno Calderón, es "la cita cultural más antigua de la ciudad" y "un modelo de cooperación institucional", ya que resulta posible gracias a "la suma de esfuerzos". Un acontecimiento que cada año persigue el objetivo, en palabras del director general del Libro de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, Julio Neira, de "fomentar los hábitos culturales" de los ciudadanos a partir de "la coincidencia" en un mismo marco "de autores, editores, libreros y lectores". En este sentido, el público infantil y juvenil es siempre prioritario y en esta edición visitarán la Feria 700 alumnos de primaria y secundaria, según indicó la concejala de Familia, Educación e Infancia del Ayuntamiento, María Jesús Botella.

A pesar de las dificultades presupuestarias, Córdoba cuenta es te año "con una Feria digna y amplia en actividades", indicó Mariano Pérez de la Concha, presidente de la Asociación de Papelerías y Librerías de la ciudad (Aplico), que participa en la organización junto al Ayuntamiento y la Junta, mientras que Cajasur, la Diputación y la Universidad figuran como colaboradores. El año pasado, la Feria se celebró en mayo y experimentó respecto a 2010 un aumento en las ventas del 11% (un 20% en la literatura para adultos y un 6% en la infantil) y de un 25% en la asistencia a las actividades programadas.

El epígrafe Córdoba, una geografía literaria abarca la relación de actividades protagonizadas por autores locales. En ella se inscriben, presentando sus obras o firmándolas, Julio Anguita (Combates de este tiempo), José Calvo Poyato (Sangre en la calle del Turco), José Manuel Ballesteros (Las aventuras de Pepe y Amanecer en ti), Francisco Onieva (Los que miran el frío), Manuel Morente Díaz (La depuración de la enseñanza pública cordobesa a raíz de la Guerra Civil), Marta Jiménez y Elena Medel (Córdoba, 2016: viaje a ninguna parte), Juan José Primo Jurado (Iglesias de Córdoba), Alfredo Asensi Díaz (Córdoba y Manolete, mano a mano. 30 apasionantes años 30. De 1917 a 1947), Alejandro López Andrada (Los ojos de Natalie Wood), Alberto Díaz-Villaseñor (Diccionario del habla cordobesa) y Fernando González Viñas (Manolete, biografía de un sinvivir), entre otros.

Del ámbito nacional, la Feria contará con la presencia de María Iglesias, que presentará Lazos de humo (la historia del hijo de un carbonero que en el tránsito del siglo XIX al XX lucha por salir de la pobreza y convertirse en abogado defensor de las causas justas); Javier Vela, con Ofelia y otras lunas (obra ganadora en 2011 del premio de poesía Ricardo Molina); Fernando Delgado, con También la verdad se inventa (ver despiece); Javier Gomá, con Ingenuidad aprendida (una colección de ensayos breves que suponen una reivindicación del pensamiento filosófico aplicado a la vida cotidiana); Clara Sánchez, con Entra en mi vida (una novela sobre un tema muy actual: el robo de bebés); Inma Chacón, con Tiempo de arena (novela sobre la masonería femenina, la lucha por la igualdad y el combate entre la tradición y la modernidad a finales del siglo XIX y principios del XX, finalista del premio Planeta el año pasado); Nuria Barrios, con Nostalgia de Odiseo (poemario en el que propone un nuevo acercamiento a la figura de Penélope); y Santiago Posteguillo, con Los asesinos del emperador (primera entrega de una trilogía sobre el emperador Trajano, nacido en Itálica).

En la programación tienen también cabida el cine, con la presentación de la película de Miguel Ángel Entrenas Góngora, brillante oscuridad; las artes plásticas, con la exposición Circlessión de Pepe Ponce; y el teatro, con la representación de la obra Pedro y el capitán de Mario Benedetti a cargo de la compañía Círculo, además de diversos espectáculos infantiles de calle (magia, cuentacuentos, títeres, música...). Habrá dos mesas redondas: A gustar convidan, el diálogo entre la gastronomía y la literatura, con la participación de José María González Blanco, Celia Jiménez, Verónica Moreno y Almudena Villegas; y Nuevas formas de leer, con Juan González de la Cámara, David Sánchez y Gema Hernández Carralón. Y es que este acontecimiento no quiere quedar fuera del debate sobre las nuevas tecnologías, como constata el director de la Fundación Cajasur, Ángel Cañadilla, que confía en la consolidación de "un modelo en el que se vean retribuidos todos los agentes del proceso" literario.

Serán, pues, nueve días de intensa actividad en el bulevar del Gran Capitán, con mucho acento cordobés, cierta carencia de grandes nombres y un modelo y unos criterios que se mantienen respecto a años anteriores. Pero el libro estará en la calle y al alcance de todos y eso, siempre, es un motivo de celebración.

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