La pasión por el cine del profesor de la facultad de Filosofía y Letras Rafael Cejudo le ha llevado a formar, junto a otros 32 aficionados, la Asociación de Amigos de la Filmoteca de Andalucía, que ayer se presentó al público y organizó la proyección de Bellísima, de Luchino Visconti. Su objetivo es claro: promover la institución y acercarla a los ciudadanos.

-¿Por qué surge esta asociación?

-Es una iniciativa espontánea, particular, de un grupo de aficionados. En mi caso, en esta última etapa de la Filmoteca, cuando más se ha abierto a la sociedad, por mi trabajo suelo participar en sus actividades. Así se me ocurrió que la gente debería y podría conocer más la Filmoteca y promover actividades, y esa es la idea.

-¿Cuáles son sus objetivos?

-Dar a conocer más la Filmoteca y las actividades que realiza porque mucha gente en Córdoba no sabe ni que existe. Además queremos colaborar con esta institución promoviendo y realizando incluso nuevas actividades. Queremos promover la cultura del cine, no sólo la proyección de películas, sino organizar cinefórums, publicaciones, constituir grupos de discusión y sobre todo reunir a la gente que esté interesada en el cine en Córdoba.

-¿Qué actividades van a celebrar?

-Por un lado vamos a arrancar con una página web de crítica cinematográfica. La idea es que se puedan publicar críticas de películas que se proyecten en cualquier subsede de la Filmoteca, porque está en los estatutos que la asociación sea de ámbito andaluz, aunque se haya iniciado en Córdoba. Por otro lado queremos organizar ciclos de cine de manera que funcionen como un club de lectura cinematográfica, que se proyecte una película y se pueda comentar después. Y además hay algunos socios interesados en los cortometrajes y barajamos la posibilidad de organizar algún ciclo. Hay otras actividades posibles. En las reuniones hay quien dice que debemos acercar la Filmoteca a ámbitos donde normalmente no está, como colegios u hospitales, pero eso está por hacer.

-¿Cree que la Filmoteca ofrece un servicio adecuado?

-Creemos que sí. Personalmente considero que el público en general está acostumbrado a recibir una serie de servicios culturales pero es interesante también que los usuarios colaboren y hagan cosas. No es que la asociación surja porque creamos que hay carencias en la Filmoteca; al contrario, creemos que funciona muy bien y ojalá pueda seguir así indefinidamente.

-¿Llega a suficiente público?

-Pues sí y no. La Filmoteca de Andalucía es una institución que lleva tiempo en Córdoba, con una programación regular y de calidad y que ha ido generando un público fiel. Pienso que a nivel cultural el problema en Córdoba es que no hay públicos sólidos. La Filmoteca suele programar todos los días y hay una media entrada. Pero claro, sería bueno que fuera más gente y para eso es necesario que la conozcan porque muchos cordobeses no saben ni que existe ni dónde está.

-¿Quién se puede unir a esta asociación?

-Hacerse miembro es muy fácil. Son 10 euros al año, un precio simbólico, y gratuito para estudiantes y desempleados.

-¿Qué le ha parecido esta iniciativa a la institución?

-Tenemos todo su respaldo. De hecho la Filmoteca ofrece a los socios la sala Josefina Molina para reunirse, mayor facilidad para acceder a sus fondos bibliográficos y la posibilidad de organizar pases para los socios.