El empate cedido esta semana en Puerto Sagunto -unido a la goleada con la que el Bidasoa despachó al Hexa Aldemar- ha desbancado al Prasa Pozoblanco del liderato. Los vallesanos son ahora terceros, empatados a diez puntos con el segundo y el cuarto, pero a sólo uno del conjunto irundarra. Las primeras voces de alarma no han tardado en escucharse -el equipo lleva dos semanas sin ganar, pues en la jornada anterior cayó en casa ante el Adelma Sinfín-, pero la plantilla está tranquila y confía en salir de la crisis este sábado con motivo de la visita del Toledo.

Gerard Espigol, uno de los veteranos del cuadro prasista, ya ha dejado claro que "ni cuando ganamos los primeros partidos éramos tan fuertes, ni ahora por perder en casa y empatar en Sagunto somos tan malos. Nosotros estamos tranquilos". El catalán, uno de los fijos en las rotaciones de Paco Castillo, advierte cuál es el objetivo real del club para esta temporada: "Sabemos que haciendo las cosas bien, estaremos arriba. Nuestra obligación es estar entre los cinco primeros (el campeón asciende directamente y los otros cuatro disputan un play off). Hay que ir partido a partido y tener tranquilidad. En esta categoría, si no juegas al cien por cien, te ganan los partidos".

Espigol, acostumbrado a vivir de todo en Pozoblanco da las claves para salir de este agujero. "Cuando ganamos en Huesca y Aranda, entre nosotros no hubo excesiva euforia, y ahora tampoco estamos pesimistas. Lo que tenemos que intentar es que del Juan Sepúlveda se escapen los menos puntos posibles y recuperar la senda de la victoria que hemos perdido en estos dos últimos partidos", sentencia un jugador dispuesto a hacer algo grande.