A estas alturas de temporada, cualquier detalle es importante. José Luis Oltra lo sabe, y por eso se molesta cuando hay cosas que escapan a su dominio y que reflejan una enorme dejadez por los rectores de la competición. No es de recibo que habiendo jornada intersemanal, el Comité de Competición no varíe su hoja de ruta y se reúna para resolver las sanciones del fin de semana, algo que de manera exprés hizo si acaso con los seis equipos que ya jugaron ayer. Pero el Córdoba no sabe aún si Deivid, Caballero y Rodas serán castigados antes del partido y, en el caso de este último, si acepta el recurso para eliminar su tarjeta del sábado. Cosas que ponen en duda aquello de la mejor liga del mundo... O la segunda, pues en cabeza estaría una Primera División a la que aún sueña con volver el conjunto blanquiverde, para lo que sabe que tiene que "ganar prácticamente todo lo que queda". Eso obliga a vencer por vez primera en Anduva ante un Mirandés que puede llegar liberado de "presión" al descolgarse de la batalla por el play off. Pero una vez más, el técnico levantino quiso matizar que lo importante es cómo esté su equipo, que "llega bien", por lo que no pondrá "excusas" en caso de que no salga el plan tal y como está previsto.

"Se habla de que es la mejor Liga del mundo, pero lo es en cuanto a jugadores y probablemente técnicos, pero no es la mejor Liga. Que no tengamos constancia de si se reúne o no el Comité…Pensamos que se va a reunir, pero no confirmación", comentó Oltra, que decidió correr el riesgo de dejar en casa a Deivid y Caballero, y llevarse a Rodas, que "si no puede jugar pues habrá hecho un viaje en balde". Porque sin el canario, el técnico no escondió que "si está Héctor, jugará, y si no, lo hará otro". Habrá que ver quién, dentro de las "muchas posibilidades" que maneja el valenciano y que pasan por recuperar a alguno de los defenestrados o modificar la posición algún titular.

Centrado ya en el partido ante los burgaleses, para José Luis Oltra nada ha cambiado tras el triunfo sobre el Elche del sábado, pues "hay que ganar prácticamente todo lo que queda". "Es un partido muy importante, un campo difícil, ante un buen rival que matemáticamente creo que aún pueden llegar al play off pero lo tiene difícil y eso les quita presión; es un arma de doble filo". El preparador blanquiverde insistió en las virtudes del Mirandés, un equipo que "ya nos ganó aquí, con un sistema 4-3-3 o 3-3-3-1 muy trabajado, que marca muchos goles y, sin esa presión y jugando en su campo, querrán hacer un buen partido".

"De todas formas, como digo siempre, da igual contra quién juguemos ni dónde, tenemos que hacer un partido serio, competir a nuestro nivel y volver a la senda del triunfo fuera", argumentó Oltra, que no cree que su rival haya cambiado mucho desde que conquistó El Arcángel a pesar de perder poco después a su goleador Lago Junior: "Es un equipo valiente, con ataques rápidos, fuertes a balón parado y con buena gente que llega desde segunda línea, como Néstor Salinas".

Seguro de que sus jugadores "son conscientes de lo que hay en juego y no hay que motivarles mucho; sólo hay que llegar y tocarles la fibra un poco más", el entrenador cordobesista considera que "el equipo llega bien" a este tramo determinante del campeonato, en la que en diez días habrá que hacer frente a tres partidos. "La gente se ha cuidado y, si no salen las cosas bien, no voy a poner la excusa del físico. Además nos ha tocado dos partidos fuera seguidos en esta fase, con el desgaste añadido del viaje, pero eso repito no es excusa. Hay tiempo para descansar y al equipo, a priori, lo veo bien, responsabilizado y concienciado". Y esa es, sin duda, la mejor noticia.