Domingo Cisma tiene la última palabra sobre su presencia o no mañana ante el Oviedo. José Luis Oltra no está por la labor de "forzar a nadie", pero confía en que el lateral sevillano se ponga a su disposición tras la última sesión de trabajo que el equipo desarrollará hoy mismo en el mismo escenario del encuentro, como ayer también a puerta cerrada. Descartada la rotura y tras perderse dos entrenamientos, el zurdo se probará hoy y de sus sensaciones dependerá la convocatoria final del Córdoba, en la que entraría el jugador del filial Abel Moreno en caso de que la respuesta final sea negativa.

Después de una primera jornada sin público en la Ciudad Deportiva para terminar de perfilar el choque, Oltra se mostró ayer "ni optimista ni pesimista, sino expectante" sobre el concurso o no de Domingo Cisma ante el conjunto asturiano. "Mañana (por hoy) le haremos una última prueba y, según como se sienta, actuaremos", comentó el preparador valenciano, que dejó en las sensaciones que el propio futbolista tenga en su vuelta al verde la decisión final: "Él ya no es un chaval, conoce bien su cuerpo y sabe cómo está; le he dicho que tiene que estar seguro y convencido de que puede estar al cien por cien. No vamos a arriesgar ni forzar a nadie y, si no está, jugará otro compañero".

Sin embargo, esa decisión no es fácil de tomar para un entrenador que tiene en Cisma a su único lateral izquierdo específico del plantel, lo que hasta ahora lo ha convertido en intocable. De hecho, el futbolista sevillano, junto a Deivid, no se ha perdido ni un solo minuto en lo que va de Liga, por lo que apenas descansó en la eliminatoria copera ante el Lugo en el ya lejano mes de septiembre.

En aquel partido, su sustituto fue Abel Moreno, jugador también sevillano y criado en la cantera del Sevilla que llegó en verano para actuar con el filial y que convenció durante la pretemporada a Oltra para estar a caballo entre el primer y el segundo equipo. Con todo, hasta ahora su presencia con los mayores se ha limitado a las citaciones ante el Valladolid y el Leganés en las dos primeras fechas del campeonato, sin tener la opción de debutar siquiera.

Oltra confirmó ayer que "si Domingo no está bien, Abel entraría en la convocatoria", aunque no quiso añadir si sería o no el encargado de formar parte del once ante el Oviedo. Dentro de una plantilla con la defensa cogida con pinzas en cuanto a mimbres por la clara apuesta inicial por la polivalencia de sus hombres, el técnico tiene alguna variante más entre los profesionales de los que dispone. Retrasar de nuevo a Rafa Gálvez, que ya en su estancia en el Elche actuó en alguna ocasión tirado a la banda, cambiar de lado a Dalmau o Stankevicius, e incluso modificar el sistema son las alternativas junto a dar galones a un Abel que, tras ser básico en los esquemas de Carrión durante gran parte de la temporada del filial en Tercera División, ha perdido la titularidad en las tres últimas semanas.

Por cierto, que el problema que esta semana se le presenta a Oltra será sólo un ensayo para lo que viene, dado que hasta cinco hombres, incluido el propio Cisma -también Héctor Rodas, Deivid, Fidel y Markovic- se encuentran a tiro de una tarjeta para ser suspendidos por acumulación. Una situación que no preocupa lo más mínimo al técnico cordobesista, ya que "si no juegan unos, lo harán otros y ningún partido empezaremos menos de once". Como mañana, pues sin Cisma o con Cisma, el Córdoba tendrá un hombre para cerrar el lateral izquierdo.