A pesar de la derrota, Djukic prefirió quedarse con los aspectos positivos que dejó su equipo en Cornellá-El Prat y no se dio por vencido, porque "aún quedan muchas finales". El serbio aseguró que su equipo "mereció otra suerte" y que "no hubo recompensa" al mejor juego de los suyos en la segunda mitad.

Eso sí, el técnico reconoció que salieron al encuentro "cohibidos y con dificultades con el balón, no hemos tenido fluidez y lo perdíamos fácil". Pese a todo, el equipo estaba "defensivamente bien" hasta que llegó el gol local al borde del descanso. Entonces llegó la mejor versión del CCF, "creando oportunidades y peligro", por lo que "la sensación de la segunda parte es la que tenemos que ir repitiendo; hemos merecido más, otra suerte, pero no hubo recompensa", expuso Djukic.

Cuestionado por la ausencia de Ghilas, el balcánico no quiso usarlo como excusa y afirmó que "nos lamentamos siempre de los que no están; los que están han hecho un buen trabajo y hemos merecido mucho más, sobre todo por la segunda parte que hemos hecho".

Incluso se atrevió a valorar el duelo de ayer como un refuerzo para sus jugadores, "sobre todo reforzado por la segunda parte, que es la mejor que hemos hecho; pienso que es el camino que tenemos que seguir, ir buscando esto con mucha fuerza", porque a su juicio "el equipo tiene mucho más fútbol de lo que está mostrando y los resultados tienen que llegar". Djukic calificó esos últimos 45 minutos como "el mejor fútbol" que el equipo ha hecho con él en el banquillo, con "presión sobre el rival, apretando...".

Por eso, el técnico serbio prefirió quedarse con esa segunda cara de su equipo, tras un primer tiempo decepcionante. "Todos tenemos que seguir peleando, quedan muchos partidos y hay que seguir; es el camino y no hay otro, no hay tregua", afirmó al ser preguntado si ve irreversible la marcha del equipo en las jornadas que quedan. Djukic no tira la toalla, ni mucho menos, porque cree que "quedan muchísimas finales y lo que invita a la mejora es que el equipo va viendo lo que puede hacer y hay que ir haciendo esas cosas". Ahora sólo falta traducir en puntos unas sensaciones que, al menos para el entrenador, fueron positivas.