Los grandes ausentes en la vuelta al trabajo del equipo ayer fueron Fidel y Crespo. El primero, lesionado en el sóleo desde la pasada semana, sigue con su recuperación, mientras que el segundo, titular en la zaga frente al Real Madrid, realizó trabajo al margen alternativo tras salir tocado el pasado sábado frente a los blancos. La ausencia se debe simplemente a una medida de precaución y todo hace indicar que estará en el duelo del sábado frente al Celta (Balaídos, 22:00).

En el lado positivo está Iago Bouzón, que formó parte del grupo durante gran parte del entrenamiento. No obstante, el defensor gallego, que no juega desde que se lesionó el 30 de noviembre en El Arcángel en el envite ante el Villarreal, se retiró antes de que acabase la sesión.

La otra cara positiva del entrenamiento de ayer fue ver a Íñigo López y Luso sobre el verde de la Ciudad Deportiva. Ambos siguen con su trabajo de recuperación y entrenaron al margen del grupo, pero su regreso parece que está cercano. De hecho, al que mejor se le vio fue al pivote maño, que podría estar disponible muy pronto para Djukic. Sin embargo, el central riojano, que no juega desde que se lesionase en el Camp Nou ante el Barcelona en la última cita del 2014, notó unas molestias y paró antes de tiempo. Su vuelta es toda una incógnita.

Por otro lado, además de los asiduos Florin y Jon Villanueva, estuvieron presentes ayer los jugadores del filial blanquiverde, Sillero y José Fran. El extremo fue convocado ya el pasado sábado ante el Real Madrid. Hoy nueva sesión a puerta cerrada a las 10:30 en El Arcángel.