CÓRDOBA | REAL MADRID

La reivindicación de un descartado

  • Gunino vuelve al once titular para cubrir la baja del sancionado Campabadal El uruguayo, uno de los que pueden salir en este mercado invernal, llevaba sin jugar desde la visita a Elche

Djukic tenía un problema en la defensa. La solución fue la más fácil. Tras recuperar a Crespo -tocado durante la semana-, Gunino se convirtió en la gran novedad en el once titular del serbio. La baja por sanción de Campabadal, un fijo en los planes del preparador cordobesista en el lateral derecho, obligada a tirar del uruguayo, que volvió a jugar tras siete jornadas sin hacerlo. Tras actuar en el Martínez Valero ante el Elche, el defensor blanquiverde desapareció de los planes del técnico, que apostó decididamente por el otro jugador específico para ese costado. Sin minutos sobre el verde, se tuvo que conformar con ver los partidos desde el banquillo e incluso desde la grada. De titular al ostracismo, lo que lo condujo a estar dentro de la lista de descartes del club para este mercado invernal. Cedido por el Atlético Fénix, su regreso, tras el parón navideño, se retrasó 13 días. Los problemas con el visado, al igual que sucedió en verano, motivaron que llegase a Córdoba muy tarde. Muchos creyeron que nunca volvería, al estar entre los candidatos a salir. Finalmente, llegó y empezó a trabajar con sus compañeros, como uno más del plantel, aunque sin disfrutar de minutos en los partidos.

Cuando en la cita ante el Eibar fue expulsado por doble amarilla Campabadal, todo el mundo se echó las manos a la cabeza. El relevo natural era Gunino, que no jugaba e incluso es uno de los posibles descartes del club. Todos los ojos estaban puestos sobre él ayer en El Arcángel. Era la gran novedad del once de Djukic respecto al que salió ocho días antes. Además, tenía que torear con la más fea. Enfrente estaba Cristiano Ronaldo, pichichi de Primera División con 28 tantos tras disputarse la primera vuelta del campeonato. La batalla era desigual en primera instancia, pero luego se vio a un gran Gunino, que dio la cara y no se arrugó nunca ante el crack portugués. De hecho, éste sufrió mucho en el coliseo ribereño y no se le vio cómodo en ningún momento. Gran parte de ese mérito lo tiene el uruguayo, que trabajó y peleó hasta la extenuación.

Bien posicionado en el lateral derecho, el charrúa subió la banda cada vez que tuvo ocasión y aguantó bien atrás las acometidas madridistas. No tuvo gran peligro por su costado, ya que el conjunto blanco estuvo más espeso de lo normal en la triangulación de balón. De hecho, Benzema fue el que buscaba desatascar el juego de los de Ancelotti bajando a la medular. Lo mejor fue que, al igual que pasó ante el Eibar la pasada semana, el equipo se puso muy rápido por delante. Ghilas marcó de penalti y parte del trabajo estaba hecho. Tocaba apretar en defensa y no dejar respirar a los jugones blancos.

Con el marcador a favor, los guerreros blanquiverdes no dieron respiro al Real Madrid, que se las veía y deseaba para llegar al área de Juan Carlos. Gunino tapaba bien su costado, estando inapelable a la hora de sacar el balón, como el resto de sus compañeros de defensa.

No todo fueron alegrías. El uruguayo vio cómo el equipo madridista nivelaba el pleito en un saque de esquina, que aprovechó Benzema para batir a Juan Carlos. Tocaba empezar de nuevo. No hubo mucho tiempo para más en la primera mitad, ya que todo siguió igual.

A pesar del mazazo del gol blanco, el CCF no se vino abajo. En la segunda parte, Gunino subió menos la banda, pero en defensa mantuvo el gran nivel de la primera mitad. Sin complicaciones y con un brillante posicionamiento, el uruguayo mantuvo siempre el tipo ante Cristiano Ronaldo, Marcelo o el que se acercaba por su zona.

Incluso el físico le acompañó en todo momento, ya que tuvo que lidiar en la recta final del encuentro con Bale tras la expulsión de un ofuscado CR7, que no tuvo su día y pasó como si nada por El Arcángel. En realidad fue el día de Gunino y los gladiadores blanquiverdes, que ayer demostraron estar a otro nivel. Al final, llegó un penalti por manos de Fede Cartabia. Bale marcó y los puntos volaron. Aún así, todos brillaron y el esfuerzo realizado mereció otro premio. Con 90 minutos ante el Real Madrid, Gunino brilló en el costado. Ahora le tocará el turno a Campabadal en Vigo. ¿Cambiarán los planes del club con el suramericano tras este partido? Ayer, ante el líder, se ganó su continuidad, pero también pudo ser su último duelo de blanquiverde.

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