Un nuevo varapalo. El Córdoba B cayó goleado en Los Cármenes ante su homologo granadino y pasará una jornada más en el sótano de la clasificación, a la espera de los resultados de sus rivales más directos para determinar a qué distancia quedará la salvación. El triplete del nigeriano Isaac Success desequilibró un partido que arrancó cómodo para los locales pero que el cuadro blanquiverde logró igualar en la segunda mitad, antes de verse desbordados por la calidad de un hombre que está contando con la confianza del primer equipo nazarí.

El técnico del filial blanquiverde, José Antonio Romero, tuvo que hacer frente a la baja de José Fran -convocado con el primer equipo- y alineó a José Antonio tirado al costado izquierdo. Jonathan Bijimine actuó como central, cubriendo el puesto de César, mientras que David Álvarez actuaba de volante junto a Damián. Esas fueron las principales novedades de un conjunto blanquiverde que entró tibio al partido.

Wilson Cuero, que sólo estuvo quince minutos en el terreno de juego, abrió el marcador en el minuto seis, con uno de sus prodigiosos giros de cuello. Todo soplaba en contra del filial blanquiverde, pues el conjunto local se mostraba muy inspirado. Los nazaríes no dejaban respirar a un Córdoba B incapaz de salir de su propio campo. Al cuarto de hora, el autor del primer gol cayó sobre la hierba fruto de una sobrecarga y tuvo que abandonar el campo. En su lugar entró Success, que acabaría siendo decisivo. Para los blanquiverdes fue peor el remedio que la enfermedad. Diecisiete minutos más tarde, en el 32', el nigeriano se inventó un golazo sólo a la altura de los más grandes, abriendo aún más la herida de los cordobesistas, que hacían aguas en defensa.

Con el segundo de los rojiblancos todo parecía estar resuelto. Pero el fútbol siempre tiene un mecanismo de castigo para los que se confían. El dos a cero, que algunos dicen que es el resultado más peligroso que se puede tener a favor, rebajó el nivel de intensidad del conjunto local y acabó con los complejos del filial cordobesista, que en su primer balón al área aprovechó la indecisión de la zaga para acortar distancias por mediación de Juanfran. Dos a uno al filo del descanso y partido abierto, a pesar de todo el empuje local y los errores del Córdoba B.

Mayor sería la alegría para los blanquiverdes en el minuto 50, cuando César volvió a instalar la igualdad en el luminoso en una falta rematada con la testa. El conjunto de José Antonio Romero había hecho lo más complicado, igualando la contienda tras un mal inicio. El Córdoba B disfrutó entonces de sus primeros minutos, aunque Success se encargó de cortarlos de raíz con el tercer gol para los locales. El nigeriano definió con una pasmosa tranquilidad al alcance de muy pocos tras recoger un envío milimétrico de Clifford.

El resultado volvía a sonreír a los de Joseba Aguado, que esta vez se conjuaron para no dejar reaccionar a los blanquiverdes. Los rojiblancos se defendieron a partir de la posesión del balón y el Córdoba B se mostró incapaz de hacer frente al dominio local. Fruto de ello llegó el cuarto, también del nigeriano Success en una jugada similar a la del empate blanquiverde. Más tarde caería el quinto y definitivo, de Boateng, con el que se cerró el encuentro.

El Córdoba B sufrió una derrota sin paliativos que lo deja en una situación muy comprometida, a falta de que en la última semana de enero lleguen al plantel los refuerzos necesarios para voltear una situación preocupante. A falta de los resultados que se produzcan hoy, los blanquiverdes durmieron a tres puntos de la permanencia, aunque esa brecha puede crecer durante esta tarde.