El CCF pasó por el Camp Nou sin hacer mucho ruido y salió goleado ante el conjunto azulgrana, pese a que por momentos llegó a estar muy metido en el choque y no sufrió demasiado defensivamente. Sin embargo, en la media hora final, con el cansancio ya haciendo mella, los de Luis Enrique se ensañaron hasta completar la goleada.

Con un equipo cada vez más reconocible, Djukic planteó un partido de mucho trabajo para sus hombres, confiando en cazar al Barça en un contragolpe. Ekeng fue la novedad más reseñable en el once inicial, en lugar de Abel, en una declaración de intenciones. Tocaba despliegue físico desde el primer momento y los extremos (Borja García y Fede Cartabia) se convirtieron prácticamente en segundos laterales para cubrir el juego por bandas del Barça.

El plan inicial se tambaleó a los dos minutos con el gol de Pedro, pero el CCF tardó poco en serenarse y completar una buena primera mitad, con concentración defensiva y algún que otro contragolpe en los pies de Ghilas o Fede Cartabia. El Barcelona, consciente de que el aspecto físico pasaría factura al equipo de Djukic al final, contemporizó y esperó el momento para dar el segundo revés, obra de Suárez. A partir de ahí, las piernas pesaron y la moral baja por verse perdidos hizo el resto, para regocijo de Messi y compañía.