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"Intentaremos plantarles cara"

  • El técnico serbio rechaza el papel de "víctimas" y ve el partido como una "prueba" para la defensa

Djukic no asume el papel de víctima. El técnico cordobesista aseguró antes de viajar hacia tierras barcelonesas que su equipo "no va de víctima" al Camp Nou, porque "se intentará plantarle cara al Barça", con independencia de ser consciente de que será "difícil". "Hemos demostrado que podemos competir contra cualquier equipo, aunque ésta es una buena prueba para ver qué somos capaces de hacer", destacó el técnico serbio en sala de prensa.

Eso sí, en cuanto a su visión del partido, Djukic tiene claro que será el rival el que "tendrá la posesión y llevará el peso del partido", pero el Córdoba "intentará defender bien y salir a la contra". El preparador cordobesista se toma además el partido como "una prueba muy dura para nuestro sistema defensivo, pero confío en que estemos bien y en que podamos hacer nuestro partido", asegurando además que "el jugador o el entrenador que no sueña con que puede ganar allí, no debe salir", por lo que la motivación debe ser total.

Pese a lo complicado de la empresa, Djukic cree que sus hombres tienen "posibilidades de hacer un buen partido y sacar los tres puntos", si bien saben "que va a ser muy difícil porque en frente hay un rival enorme", algo que no es óbice para que ellos partan "con esa idea" de salir en busca de la victoria, la que sería la segunda de la temporada.

Cuestionado por si el último empate a cero en Getafe podría afectar a los culés, el preparador serbio cree que el Barcelona "no puede estar nervioso" dado que "tiene su juego establecido y sabe a lo que juega, aunque lleve muchos partidos en sus piernas". Además, también valoró que el conjunto catalán "querrá irse de vacaciones con una victoria y con buenas sensaciones, aunque lo mismo que el Córdoba". Esa es la motivación de la plantilla, marcharse a descansar después de hacerlo bien "ante uno de los grandes". Para ello, las premisas que ofreció en la previa el balcánico son "juntar las líneas y hacer bien las coberturas, además de ser agresivos defensivamente" y en cuanto sea posible "robar y salir a la contra" con velocidad.

Miroslav defendió a sus jugadores, porque "tenemos un buen sistema defensivo y estamos haciendo bien las cosas. Somos un equipo solidario y ante el Barça es una buena prueba para ver qué podemos mejorar en el sistema defensivo", reiteró. Sobre el duelo con otro técnico joven como Luis Enrique, el entrenador serbio del CCF apuntó que se midieron "muchas veces" en su etapa como futbolistas y que consideraba al asturiano como un jugador "muy bueno, con mucha calidad y velocidad".

Valorando lo que significa el partido para el cordobesismo, el entrenador serbio apuntó que "todos soñamos con ganar al Barça o al Madrid. Si preguntas a los jugadores del Barça, igual no saben nombrar a tres o cuatro de nosotros. Con todo, yo no me tiraría al río porque luego queda mucha liga y a lo mejor me resfrío o cojo una pulmonía, y tendrían que buscar a otro entrenador", bromeó al ser preguntado si celebraría de esa manera tan particular un triunfo ante el todopoderoso conjunto azulgrana.

Luis Enrique, por su parte, llega al choque ante el CCF aún arrastrando críticas por el reciente empate del equipo azulgrana ante el Getafe, un traspiés que los ha alejado un poco más del Real Madrid en la lucha por el título. Pese a todo, el técnico se atrevió a calificar como "cojonudo" su año 2014, por el buen final de temporada con el Celta y el regreso al club de su vida, el Barcelona.

Antes de recibir al Córdoba hoy, el asturiano reconoció ante los medios de comunicación que el juego de su equipo se encuentra en una fase de "evolución" y que aún debe "mejorar muchos aspectos del juego colectivo" para volver a recuperar el liderato liguero o al menos pelear de tú a tú con el Real Madrid y el vigente campeón, el Atlético de Madrid.

"A nivel personal ha sido un año cojonudo, buenísimo", reiteró Luis Enrique, ya que ha tenido "la oportunidad de mantener al Celta en Primera División y he podido regresar a mi casa, que es el paraíso", aunque en esta primera temporada está viviendo una situación "especial" por los "muchos cambios" que se han producido en la plantilla.

Por ello, y consciente de que en el club azulgrana "no hay tiempo" que perder, explicó que su plantilla sigue "el proceso natural de un equipo en evolución", después de que en la pasada jornada se confirmara que acabará el 2014 sin ser líder de la Liga.

"Hay algunos aspectos del juego que se pueden mejorar. Tras el empate en Getafe, acabamos enrabietados por no conseguir la novena victoria consecutiva. Pero no nos gusta exagerar cuando se gana tanto, ni dramatizar cuando se pierde", agregó. Así las cosas, Luis Enrique prefiere poner las notas a final de temporada: "puntuaré a mi equipo al final de la temporada", reiteró y se mostró convencido de que aún son capaces de recuperar la desventaja con el Real Madrid en la segunda vuelta y pelear por el título liguero hasta el final de la competición.

Sobre el partido de hoy ante el Córdoba, el asturiano avisó de los peligrosos contraataques del equipo de Djukic, el arma que más teme de los blanquiverdes: "Será un rival cerrado atrás intentando generar problemas a la contra. Hay muchas soluciones para prepararlo. Deberemos atacar con orden y criterio y dar pocas opciones", indicó el técnico sobre su visión del planteamiento que presentará el CCF en el Camp Nou.

Tras el duelo ante el Córdoba, los jugadores del Barcelona tendrán diez días de vacaciones en los que, según Luis Enrique, se les ha preparado un plan físico específico. "Son unos días para desconectar y estar con la familia. Necesito a los jugadores frescos a nivel mental y a nivel físico", resaltó. Unos jugadores que demostraron frescura fueron los suplentes que ganaron 8 a 1 al Huesca el pasado miércoles. En este sentido, Luis Enrique elogió su estado de forma: "Demostraron que tienen nivel para ser jugadores del Barça y que están a disposición y tienen posibilidades. Pero no hay minutos para todos, a pesar de que soy un entrenador que da muchos más minutos que otros entrenadores".

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