El gran clásico de los últimos años en el fútbol alemán presenta hoy su versión más desigual al enfrentar a un Bayern de Múnich lanzado a la defensa del título ante un Borussia Dortmund en crisis que coquetea con el descenso.

Los de Guardiola llegan a la décima jornada de la Bundesliga líderes en solitario con 21 puntos, mientras que el Dortmund de Klopp es décimo quinto con siete puntos y cuatro derrotas seguidas en Liga.

Los bávaros, sin embargo, no se fían. "El Dortmund tiene en este momento algunos problemas, pero eso no significa que no los tomemos en serio", señaló el jefe de la junta directiva del Bayern, Karl-Heinz Rummenigge.

El Dortmund, campeón en 2011 y 2012 y subcampeón en 2013 y 2014, está teniendo un inicio de temporada catastrófico, marcado por varias bajas y errores incomprensibles en defensa. Una derrota en Múnich podría dejarlo en descenso.

Pero el regreso de algunas estrellas lesionadas y la victoria por 3-0 el martes en la copa ante el St. Pauli, de segunda división, han alentado en Klopp la ilusión de usar el cruce ante el Bayern como punto de inflexión del año.

El duelo enfrentará además por primera vez en Liga a Lewandowski, ahora con la camiseta del Bayern, ante su antiguo club. El primer encuentro fue en la Supercopa alemana, que los de Klopp ganaron por 2-0. Los hinchas del Bayern seguirán también con atención lo que ocurra mañana en el Hoffenheim-Borussia Mönchengladbach, ya que ambos acechan el liderato a cuatro puntos de los bávaros.