Chris Froome y Nairo Quintana salen hoy de Jerez de la Frontera con el cartel de favoritos de la Vuelta, ante la oposición de los clásicos españoles, como Joaquim Purito Rodríguez, Alberto Contador y Alejandro Valverde, que jugarán diferentes bazas en un recorrido más que propicio para los escaladores.

La 69ª edición de la Vuelta, que concluirá el 14 de septiembre en Santiago de Compostela, ofrece la mejor participación de los últimos años. A excepción de Nibali, ganador del Tour, los nombres más ilustres han bajado al sur para aprobar el curso en septiembre.

Los focos apuntan a Froome (Sky) y Quintana (Movistar) como duelo estelar. El británico, recuperado de sus fracturas en ambas muñecas en el Tour, viene a salvar una temporada hundida desde su retirada a las puertas del pavés de Arenberg. Rodeado de un potente equipo, su objetivo es el maillot rojo.

Con esa misma idea llega Quintana, de 24 años, ganador del Giro y de la Vuelta a Burgos. En su equipo ya no hay debate: será el líder indiscutible. Valverde tendrá que trabajar para el ciclista de Boyacá.

En un segundo frente están los treintañeros españoles, que llegan en diferentes circunstancias. Purito Rodríguez (Katusha) cuenta con una Vuelta diseñada para él, con finales explosivos donde podrá lograr bonificaciones. En el Tour no quemó las naves y pudo preparar la Vuelta en este mes. Retirado en el Giro, también debe aprobar en septiembre.

Alberto Contador (Tinkoff), sorpresa de última hora, es una incógnita. El madrileño también quedó K.O en el Tour por una caída que le produjo una fisura en la tibia, y advierte que no llega en condiciones de pelear con los mejores, sino de optar a alguna etapa en la tercera semana. Si está en carrera, lógico es que saque a relucir sus genes competitivos. También lo tiene claro Alejandro Valverde (Movistar), que vuelve a doblar con Tour y Vuelta. El murciano sabe que los galones ya los lleva Quintana, pero busca la gloria en algún final explosivo.

Sin Chris Horner en la salida, ya que el vigente campeón fue excluido por su equipo por bajo nivel de cortisol, la Vuelta presenta más alicientes en la nómina de participantes. Los equipos llegan con los mejores corredores, muchos de ellos para preparar el Mundial de Ponferrada, que se disputará a finales se septiembre. Por ello, será interesante seguir a Rigoberto Urán, Andrew Talansky, otra víctima de las caídas en el Tour, y Thibaut Pinot, tercero en la grande boucle y top ten el año pasado en la Vuelta. También aportarán algo más que el nombre la pareja del BMC Cadel Evans y Samuel Sánchez.

¿Asomarán los nuevos valores? De ello se ocuparán, aparte de Quintana y Pinot, el italiano Fabio Aru, tercero en el Giro, y el holandés Wilco Kelderman. El cambio generacional parece inminente.

La 69 edición de la Vuelta sigue fiel al modelo de trampas cercanas a meta que animen el día a día y metas en alto, como un sello de identidad que trata de cuidar la organización. Además, los corredores deberán afinar su rendimiento en dos pruebas de contrarreloj individuales.

Pronto llegarán las emociones. Arcos de la Frontera (tercera etapa), Alcaudete (séptima) y Obregón (decimotercera) ofrecen alicientes con repechos al final, donde deberán marcarse los favoritos, que querrán sumar segundos extras. Destacan también los finales en alto de Cumbres Verdes (sexta etapa), Valdelinares (novena), San Miguel de Aralar (undécima), La Camperona (decimocuarta), Lagos de Covadonga (decimoquinta) y Ancares (vigésima), en un claro guiño a los escaladores.

No es ésta una Vuelta para los velocistas, que apenas tendrán cuantro opciones. Aun así, no faltan los mejores. Mark Cavendish será la referencia, siempre y cuando esté completamente recuperado de la fractura de clavícula que sufrió en el Tour. Rivales no le van a faltar: Peter Sagan, John Degenkolb, Nacer Bouhanni y Michael Matthews.

Bajo el sol jerezano, con el olor del vino color oro característico de la zona, se lanzarán los 22 equipos en busca de lucir el primer maillot rojo de la ronda española.