Pepe Bordalás es un sensacional entrenador. Quizás tenga un estilo que no guste mucho -o nada-, pero con otro tipo de armas es capaz de sacar muchísimo provecho a plantillas con pocos argumentos. Cuando todos apuestan por el juego ofensivo, él prefiere dar prioridad al defensivo, minimizar los fallos propios, multiplicar las lagunas del enemigo y sacar gran tajada de la estrategia. Estos réditos le convierten en ídolo de los suyos y el más odiado por los rivales, algo que ya le ha valido la catalogación de persona non grata en varios escenarios como Córdoba, donde dejó huella cuando dirigía al Elche. Ahora se ha sumado Lugo. Todo después de que el Alcorcón, un equipo al que tiene vivísimo en la pelea por el ascenso directo a Primera División, asaltara el sábado el Anxo Carro por la mínima (0-1) y una buena dosis de ese otro fútbol que exaspera al adversario, sobre todo si ve escapar una oportunidad de oro para meterse en una pelea con la que nunca soñó.

El Lugo llevaba cinco encuentros seguidos sin perder, acumulaba dos meses sin caer delante de su afición y rompió la racha ante un rival que tiró de veteranía, perdió tiempo con el marcador a favor y tuvo de su lado la fortuna. Se aprovechó de una posible falta al portero Yoel y un rebote para adelantarse en el marcador en la primera parte y, en el tiempo de descuento, el poste evitó el tanto del empate del Lugo en un duelo sin ritmo, pobre en juego, con escasas ocasiones y en el que el estilo alfarero sacó de quicio a los rojiblancos.

Adonde llegaría el mosqueo que un técnico tan cuerdo como Quique Setién y parte de su plantilla se posicionaran claramente al término del encuentro, dejando claro que prefieren que sea cualquier otro equipo el que ascienda a la máxima categoría. "A mí me cabrea muchísimo ver a los jugadores que se tiren, que pierdan tiempo, que hagan aspavientos reclamando. Si me das a elegir entre todos los equipos que tengan que ascender, espero que éste no lo haga", señaló el cántabro, al que siguió su jugador Víctor Díaz: "De los equipos que están ahí arriba es el que menos nos gusta a todos por el fútbol que practica. Es un equipo veterano que cuando tiene le resultado a favor pierde mucho tiempo. Sabemos que son expertos en eso y sabemos cuál es su forma de jugar. Para mí también es preferible que suba el Villarreal antes que el Alcorcón, por ejemplo". Parece claro que, de momento, a Bordalás no le pondrán una calle en Lugo. Quizás si algún día llega para sentarse en el banquillo, la cosa cambie de forma considerable...

La Cataluña Cup no interesa

Hace unos años hubo un lumbreras dentro de la Federación Catalana de Fútbol que decidió que la Copa Cataluña se disputara a finales de temporada, justo cuando los equipos se juegan su futuro. Lo hizo sin pensar nada en el espectáculo, seguro. Porque lo más normal del mundo es que se produzcan situaciones como la de este año. El Barcelona, inmerso como está en las semifinales de la Liga de Campeones y pendiente de asegurar su título liguero, ha decidido que esta competición la jugará su filial. No es que sea un mal equipo, todo lo contrario, pero no es lo mismo. "El Barça llevará a su mejor equipo, el Barça B, que está desarrollando una gran campaña en Segunda División", confirmó ayer el portavoz de la junta directiva, Toni Freixa. Así, el conjunto de Eusebio Sacristán visitará mañana al Nástic de Tarragona (21:30), quedando la otra semifinal para el Espanyol y la Llagostera (19:00). Por cierto, el cuadro perico sí ha confirmado que viajará con toda su plantilla, lo que sin duda le otorga el cartel de favorito para levantar el título. A no ser que el devenir de las distintas competiciones obligue a los azulgranas a dar marcha atrás y jugar, llegado el caso, la final con el primer equipo...

Hasta el rabo, todo es toro

El Villarreal y el Huesca viven situaciones muy distintas. Mientras uno pelea por conseguir el billete directo hacia Primera, el otro sufre para no caer a Segunda B. Pero los caminos de ambos se cruzaron este fin de semana cuando la diosa Fortuna se les apareció. Los amarillas salvaron un punto en Murcia en el minuto 96 y los oscenses ganaron al Sabadell en el 92 para dejar el objetivo muy presente.