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Buenos detalles, pero sin pegada

  • El CCF encaja su primera derrota de la fase de preparación ante un Sevilla letal en el área · Los blanquiverdes, que se vieron por detrás muy pronto, no le perdieron nunca la cara al encuentro · Dos misiles de Trochowski rompieron el equilibrio

El Córdoba encajó su primera derrota de la pretemporada ante un Sevilla letal en el área, en un partido que rompió el alemán Trochowski con dos misiles en el tramo inicial de la segunda mitad. Hasta entonces, el conjunto blanquiverde había aguantado el tipo. Es más, pese a verse muy pronto por debajo en el marcador, nunca le perdió la cara a un encuentro en el que dejó buenos detalles de cara al futuro. Ante un rival de Primera, más rodado y con gente de la calidad de los internacionales Negredo y Jesús Navas, el CCF tuvo momentos en los que mandó, controló e impuso el ritmo que más le convenía. El problema estuvo a la hora de rematar la faena. El equipo no tuvo la pegada de otros días y eso ante un enemigo de primer nivel se paga muy caro. Menos mal que para la guerra de verdad quedan aún otros veinte días.

Paco Jémez apostó para su rentrée con el cordobesismo por un once en el que destacaban la presencia de Gaspar y Pepe Díaz, y los canteranos Bernardo Cruz, Fede Vico y Carlos Martínez, la gran sensación de la pretemporada blanquiverde. Enfrente, el Sevilla salió con todo lo disponible, con los recién ingresados Spahic, Trochowski y Manu del Moral, y Negredo como hombre más adelantado ante la ausencia del malí Kanouté. 4-4-2 contra 4-2-3-1, pero con conceptos muy similares: fuerte presión, defensa adelantada y tener el balón lo máximo posible.

El Sevilla encaró el partido con un puntito más. Marcelino tiene ya en mente la previa de la Liga Europa -el 18 de agosto es la ida y el 25 la vuelta- y volvió a convocar a sólo 18 futbolistas. Bajo el mando de Trochowski, los hispalenses avisaron con una primera internada de Manu del Moral que Cristian abortó in extremis. Menos suerte tuvo el ex de la Ponferradina la siguiente vez que le cogieron la espalda. El alemán habilitó a Negredo y el punta se sacó un zurdazo cruzado imposible para Alberto García.

El CCF por primera vez en la pretemporada se veía con el marcador en contra. Pero no le perdió la cara al encuentro. Todo lo contrario. Carlos Martínez lo intentó por la izquierda -Paco no quiere que los interiores se asienten en su costado y ordena cambios continuos-, pero fue Cristian García el que se apuntó el primer chut, desviado, tras una apertura de Charles a la autopista que la caída de los puntas había abierto en el flanco derecho.

El control del duelo ya estaba equilibrado. Ahora hacía falta morder. El Sevilla parecía que no estaba, atrincherado en su parcela, dejando metros a su rival, pero volvió a asustar con dos internadas de Jesús Navas, la primera resuelta por Alberto García y la segunda abortada por el asistente por fuera de juego de Negredo. La respuesta cordobesista llegó con dos golpes francos botados por Caballero que resolvió sin problemas Palop.

La afición tenía ganas de ver cosas. Cada aparición en campo contrario, cada intento de llegar con la pelota controlada, era recibida con aplausos. Los pitos quedaron para Spahic, que hizo gala de su fama de duro con una fuerte entrada a Charles cuando el CCF quería salir rápido. A la siguiente que se vieron las caras, el brasileño le sacó una amarilla pegado al córner.

Los blanquiverdes llegaban bien al área de Palop, pero ahí se le hacía de noche. Pepe Díaz se fabricó una jugada personal tras luchar un balón hasta el banderín, pero su pase de la muerte no llegó a los pies de Martínez. Mucho más peligro llevó el Sevilla. Primero con una falta frontal botada por Trochowski que acabó en la red, aunque Lesma López observó fuera de juego de Alexis. Luego con un derechazo de Jesús Navas que repelió el larguero.

En los compases finales del primer periodo, las ganas del CCF podían más que las piernas, mucho más pesadas que las de su enemigo, con una semana más de trabajo en la pretemporada. Fede Vico lo intentó con un zurdazo excesivamente cruzado la primera vez que tuvo metros para correr por su costado. Pero Palop se marchó a vestuarios prácticamente inédito. Fue el único debe de un Córdoba con presencia, con mando, con control, pero sin pegada.

Al contrario que en los dos ensayos anteriores, y tal y como había anunciado en la previa, Paco Jémez dejó a un lado el carrusel de cambios en el descanso. Sólo tres novedades de inicio: Tena, Borja García y Balsas, por Gaspar, Carlos Martínez y Pepe Díaz. Hombre por hombre. Nada cambió. Ni siquiera el decorado del choque. El Sevilla volvió a golpear muy rápido, con un pase interior de Negredo a Jesús Navas al que respondió bien Alberto García. El CCF no se amilanó. Borja García empaló mal un envío de Cristian García y poco después volvió a intentarlo con un disparo seco que salió alto.

El choque se encendió. Siempre con el Córdoba metido en él, sin perderle la cara a un Sevilla con más rodaje, más hecho. De Primera. Pero aún así también es vulnerable. Lo demostró Borja García con una volea que no pudo atajar Palop para hacer el empate. El origen ya merecía ese final, con una pared entre Cristian García y Fede Vico, que dejaron con el molde a Fernando Navarro y Manu.

Lástima que la alegría le durara poco a los blanquiverdes. Nada más sacar de centro, el Sevilla se encontró con una falta a 25 metros. Trochowski no se lo pensó dos veces y se sacó un chut que se coló tras tocar en el larguero, con la colaboración inestimable de Alberto García, que pudo hacer algo más. Tocaba volver a empezar. Paco apostó por gente de refresco, con Hervás y Patiño como protagonistas. Había que meter una marcha más.

Pero apenas dio tiempo. Bernardo Cruz derribó a Negredo cuando éste encaraba ya la portería. Los sevillistas pidieron penalti; el árbitro la sacó a la frontal. Trochowski se la pidió y volvió a fusilar al meta blanquiverde, que ni vio la pelota, que le pasó por encima de las manos. El Sevilla volvía a golpear, como cada vez que pisaba el área cordobesista. Bastó con ver el gesto de Negredo, que intentó una vaselina con el pecho que tocó el larguero antes de irse fuera. Crack de Vallecas.

Quedaban más de 20 minutos para el final, pero poco se vio. El paso de los minutos empezó a notarse en las piernas. Pero aún había tiempo para algún que otro destello. López Silva le hizo un traje a Dabo antes de sacar un centro que Balsas envió a la red; ya estaba anulada la jugada por falta previa del senegalés. El golpe franco se saldó sin consecuencias. Como luego un saque de esquina que no supo empujar Balsas tras un fallo en cadena de la zaga hispalense. Fue la última de un CCF que se dejó el alma, que ofreció detalles de esperanza para su sufrida afición y no desmereció a un Sevilla con una pegada de primera. Tanto que cerró la goleada en el tiempo de descuento, con un arranque de genio de Jesús Navas que marcó a puerta vacía tras regatear a Alberto García. Ahí estuvo la diferencia.

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