Córdoba

La filosofía de la bandurria y la pandereta

  • El XX Certamen Nacional de Tunas de Medicina reúne a una decena de agrupaciones de toda Españal solidaridad Los cinco euros recaudados por cada entrada fueron donados a la Asociación Cordobesa de Esclerosis Múltiple.

Hay unos versos de Juan de la Encina que condensan a la perfección la filosofía de un tuno: Hoy comamos y bebamos, y cantemos y holguemos, que mañana ayunaremos. Joaquín de Haro, organizador del XX Certamen Nacional de Tunas de Medicina, lleva aplicando esa máxima a su forma de ver la vida desde que en 1977 accedió como novato a la tuna de Medicina de Córdoba. "Hay que tener desparpajo, valía, ser servicial, amistoso y, sobre todo, que te guste la música. Porque la esencia de una tuna son las serenatas", describe De Haro.

La tuna de Medicina cordobesa se convirtió ayer en anfitriona de otras nueve agrupaciones de toda España en un concurso que reunió a varios centenares de personas en el Palacio de la Merced; la recaudación de la entrada se donará a la Asociación Cordobesa de Esclerosis Múltiple (Acedem). Y entre el público, como era de esperar, muchas más mujeres que hombres, una indicación clara de que la música aún sirve para las conquistas amorosas. "La tuna es una forma de aunar música, diversión y ligoteo", reconoció De Haro.

La agrupación de la Universidad Complutense de Madrid fue la encargada de romper el hielo ante el auditorio. Luego actuaron formaciones llegadas desde Pamplona, Valencia, Granada, Sevilla o Badajoz. La de Córdoba, fuera de competición por ser la anfitriona, actuó cerca de la medianoche. Aunque en la actualidad permanecen activos 40 de sus integrantes, ayer se subieron al escenario cerca de 60. Y, a pesar del nombre, pocos proceden de la rama de la Medicina. "El único requisito es acceder cuando se está en la Facultad, da igual qué carrera se esté estudiando", aclaró De Haro.

La primitiva tuna de Medicina de Córdoba surgió como comparsa de Carnaval en 1787 con el nombre de Los Medicinantes. La formación duró pocos años y, tras su disolución, resurgió varios siglos más tarde, en concreto en 1974. Desde entonces reúne un amplio palmarés, con cinco primeros premios en certámenes internacionales y reconocimientos al mejor solista y mejor bandera. En septiembre, fue la mejor formación en un concurso internacional celebrado en Eindhoven, Holanda.

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