LA consejera de Cultura, Rosa Aguilar, y la delegada del Gobierno de la Junta, Rafaela Crespín, presentaron ayer los números de los presupuestos del gobierno andaluz para Córdoba de cara a 2017. Un año más, la dificultad a la hora de evaluar los fondos que corresponden a la provincia estriba en que las partidas no vienen provincializadas, por lo que resulta complicado detallar el montante definitivo que se destina al territorio. En cualquier caso, y a tenor de las cifras, sí se observa una mejora en el capítulo de las inversiones que, según Crespín, aumentan en un 10% respecto al año pasado. Está claro que cualquier avance en este sentido es positivo, pero sin olvidar que se comparan con unas cuentas -las de los últimos años- que en nada han beneficiado a Córdoba. La principal novedad es que se reactivan algunos proyectos que estaban en el tintero, pero la mayoría de ellos con cantidades modestas, como la mejora de algunas carreteras, el plan de depuración de aguas, la necesaria partida para desbloquear el Palacio de Congresos de la calle Torrijos o algunas acciones puntuales en el Hospital Reina Sofía, el inicio del proyecto del complejo asistencial de alta resolución de Palma del Río o la reforma del centro especialidades de la avenida de América. Además, se resuelven algunas necesidades educativas, como la edificación de un nuevo colegio en la zona de Turruñuelos. No obstante, los grandes déficits en infraestructuras que arrastra Córdoba desde hace años siguen en el aire pese a esos tímidos avances. Así, nada de sabe todavía de qué pasará a corto plazo con la Autovía del Olivar, la demandada autovía con Jaén, la Ronda Norte en la capital o el plan de modernización del Reina Sofía, proyectos ambiciosos que se quedaron en el tintero hace años y que tendrán que esperar una vez más. Una mención aparte merecen las iniciativas ligadas a la Consejería de Cultura, de las que ayer habló de nuevo Rosa Aguilar. Así, el Centro Andaluz de Creación Contemporánea de Córdoba -conocido como C4- abrirá sus puertas antes de que acabe el año, pero en unas condiciones que nada tienen que ver con lo que se proyectó en un principio. La Junta de Andalucía ha optado al final por trasladar a ese espacio la Filmoteca de Andalucía, una decisión que se parece más al intento de querer justificar la puesta en funcionamiento del C4 que a otra cosa. Si ese es el único cambio previsto, se evidencia que sigue sin haber un plan funcional que ponga en marcha una infraestructura millonaria cuya finalidad nunca ha estado demasiado clara. El presupuesto de la Junta de Andalucía para Córdoba supera al anterior, pero es aún muy mejorable para la provincia.