Más de medio centenar de actuaciones -repartidas entre la adaptación de pasos de peatones o paradas de autobuses y eliminación de bordillos, entre otros- para mejorar la accesibilidad y la movilidad en el barrio de la Fuensanta. Éste es uno de los proyectos más ambiciosos del plan Mi barrio es Córdoba, que cuenta con un presupuesto de casi 400.000 euros y que ha iniciado ya su proceso de licitación junto con otras actuaciones como la remodelación de la calle Yosuf o la de la avenida Cervantes. El proyecto contempla la intervención en un total de 13 calles, avenidas y plazas y se trata de pequeños trabajos que supondrán un gran avance en la calidad de vida de los vecinos. De hecho, muchas de las actuaciones que se han planteado son antiguas demandas de los vecinos.

Así, en la calle Cáñamo se prevé la construcción de un paso de peatones frente al colegio Lucano y mejorar y ampliar los tramos de acera para contar con más itinerarios peatonales. En la calle Melilla, por ejemplo, se prevé una nueva zona de estancia en parte del acerado que contará también con la plantación de árboles, mientras que habrá un nuevo paso de peatones semaforizado en la avenida Campo de San Antón, junto a su unión con Ronda de la Manca. También habrá un nuevo paso de peatones frente al Banco de Alimentos, mientras que se adaptará la parada de autobús de la avenida de la Fuensanta en su intersección con Calderón de la Barca.

El barrio de la Fuensanta es uno de los más poblados de la capital y con un elevado flujo peatonal derivado de su proximidad con zonas comerciales y de ocio que, sin embargo, cuenta con muchas carencias en materia de movilidad. La falta de pasos de peatones en la parte oeste unido a la elevada circulación provoca que diariamente haya viandantes cruzando la calzada en puntos no regularizados.

Junto al proyecto de la Fuensanta, ayer se inició el proceso de adjudicación de la remodelación de las calles Fray Vasco, Yosuf y el pasaje Escritor Narbona, todas ellas incluidas dentro del plan Mi barrio es Córdoba, financiado entre el Ayuntamiento y el Gobierno central a través del Ministerio de Hacienda.