Alrededor de 370.000 euros. Esa es la deuda que acumula la Asociación de Hosteleros de Córdoba (Hostecor), según apuntó ayer su actual presidente, Francisco de la Torre. El empresario, que reconoció que ya sabía de la delicada situación de la organización cuando presentó su candidatura, también quiso dejar claro que la continuidad de Hostecor "está garantizada" ya que la junta directiva está dando pasos en la negociación de la deuda. El presidente de Hostecor reaccionó así después de que el Día hiciera público un informe externo sobre las cuentas de la entidad durante 2013 y 2014 -cuando al frente de la cual estaba Antonio Palacios- y en el que se detectan algunos errores contables. De la Torre lamentó que el informe elaborado demuestre que "faltan papeles básicos que se han pedido formalmente", pero no se han facilitado a la empresa auditora. Además, también se ha puesto en evidencia que se han producido errores y deficiencias en la gestión, que se tilda en el documento de "poco transparente", entre otros calificativos. El siguiente paso que dará la patronal de la hostelería será llevar el documento a la junta directiva para que tome conocimiento, así como a la asamblea, que tomará las medidas oportunas tanto para reconducir la situación como para exigir responsabilidades. El propio De la Torre ya había apuntado la posibilidad de llegar incluso a los tribunales si los errores eran lo suficientemente graves como para requerir la intervención de la Justicia. El presidente de Hostecor reiteró ayer a este periódico que esa posibilidad sigue estando sobre la mesa, aunque la decisión será de la asamblea y la junta directiva y tendrá que contar siempre con el respaldo de los servicios jurídicos de la entidad. "Vamos a llegar adonde tengamos que llegar", insistió el empresario, quien también dejó claro que Hostecor es "viable" una vez que se deshagan de la deuda o la intenten renegociar para poder mantener la actividad.

De la Torre no quiso pronunciarse más sobre la gestión de su predecesor, aunque el informe es tajante. El documento achaca la situación actual de la asociación en el ingreso de una subvención para formación que, "por no estar soportada por suficientes suscripciones", tuvo que devolverse. Esto provocó "la solicitud de un crédito" que fue el origen, en parte, del desequilibrio de la entidad. El expresidente de Hostecor, Antonio Palacios, aseguró sin embargo que desconocía el documento y, por tanto, "no puedo hacer valoración alguna". Palacios quiso recordar que lleva fuera de la asociación -tanto como presidente como de los órganos de representación de las organizaciones empresariales- más de ocho meses, desde que se celebraron las últimas elecciones. Palacios explicó que desde el año 2000 "se hacía revisión limitada de las cuentas de cada ejercicio por profesionales independientes de reconocido prestigio" y eran aprobadas después en comité ejecutivo y junta directiva, "precisamente para corregir y depurar cualquier error que se pudiera haber cometido", antes de someterlas a la asamblea general.

La última asamblea general, en junio de 2015 y correspondiente a los resultados de 2014 "fue aprobada por unanimidad, tanto por el comité, la junta directiva y la asamblea general, de la que formaba parte el actual presidente y algunos miembros de su actual junta directiva", explicó el expresidente de Hostecor. Palacios quiso recordar también que el actual presidente "fue miembro activo de mi junta de gobierno como vicepresidente de Cafeterías, durante casi dos legislaturas, y era conocedor de la situación económica financiera de la entidad, la cual consta en los informes de revisión y tal como se presentó en la asamblea general de 2015".

Palacios respondió así al diagnóstico que hace el informe de la situación de la entidad y que apunta a la existencia de "un claro desequilibrio patrimonial", que además viene de lejos y que es debido a varias causas. En primer lugar, "la asociación mantiene cifras negativas al cierre de 2014", a lo que hay que añadir que "la tesorería es prácticamente nula y existe un alto endeudamiento". Hostecor, además "tiene deudas vencidas con trabajadores, Hacienda y la Seguridad Social". Se refiere a la sanción impuesta por Inspección de Trabajo por los impagos a la Seguridad Social de uno de los empleados y que se eleva a 49.000 euros. Ya a mediados de 2014 la asociación reconocía su "alarmante situación" y tenía intención de reconducirla, aunque no ha sido posible.

El informe externo continúa. En uno de sus apartados advierte de que, supuestamente, no se ha declarado el IVA en alguno de los servicios que el colectivo presta. También se detecta, según el análisis de las declaraciones de las retenciones que el IRPF, que "se han declarado e ingresado en algunos trimestres por su devengo en la confección de las nóminas y no por su retención sobre el pago", tal y como obliga la normativa. En el apartado legal, según el documento, hay otra deficiencia y es que "se nos manifiesta que no se han presentado impuestos sobre Sociedades" correspondientes a los ejercicios que se han examinado ni a los anteriores, cuando Hostecor "pudiera estar obligada a ello".

El informe apunta sin cortapisas que la gestión administrativa "no ha sido la adecuada" a pesar de que se ha intentado "alguna acción de limpieza contable". La falta de control, según las consecuencias expresadas en el documento, ha sido constante en el organismo, lo que ha implicado "un riesgo elevado" en las partidas de Hostecor. "Errores y carencias contables" son otras de las descripciones que se hace de la anterior gestión de la patronal, derivada de una actividad "poco eficiente" en el trámite de archivos que se demuestra "en las carencias y demoras en la aportación de la documentación requerida".