La denuncia que efectuó el pasado jueves CCOO por las agresiones recibidas en tan sólo un mes por siete profesionales de la unidad de Salud Mental del Hospital Provincial -y que la propia dirección del complejo Reina Sofía intentó mitigar con la negación de las críticas derivadas de dichas agresiones- dejó ayer un nuevo capítulo. Y es que los profesionales de la referida unidad confirmaron las denuncias realizadas por la organización sindical con la firma conjunta de un escrito. En éste, los sanitarios corroboran que los cambios reorganizativos ordenados por la dirección de la Unidad de Gestión Clínica (UGC), se llevaron a cabo en pleno período vacacional "sin informar ni consensuar con los profesionales de Enfermería" y que "la dotación de personal en la unidad está muy por debajo de lo mínimamente recomendable". Tanto es así que los profesionales indicaron que "existen varias bajas laborales sin cubrir, se contrata menos del 80% del personal que está de vacaciones y los contratos que se han realizado tan sólo son al 75% de la jornada".

La organización situó a los pacientes agudos o más graves en el ala izquierda de la planta y a los enfermos en tratamiento de control -los que a corto plazo recibirán el alta- se aglutinan en el lado derecho. Antes todos estos pacientes convivían juntos con el propósito de equilibrar el trabajo de los profesionales de las dos alas. El Hospital, que alegó que los cambios se ejecutaron en un período en que la presión asistencial disminuyó por debajo del 50%, ha topado ahora con la versión de los principales afectados. La plantilla negó ayer que la planta haya experimentado en el momento en que la dirección ejecutó la reorganización esta circunstancia, "ya que en los días siguientes a adoptar la medida, el ala izquierda estaba por encima del 70% y la derecha por encima del 65%".

La plantilla de la unidad de Salud Mental desmintió que se haya redistribuido al personal, como indicó el pasado jueves el complejo hospitalario, ya que "con la dotación de personal existente es imposible redisfrutar el personal que no existe". Esto es, según la denuncia efectuada por CCOO, en los meses del estío el personal de la planta se reduce de las dos enfermeras y tres auxiliares que hay en cada ala normalmente a una enfermera y dos auxiliares.

El personal sanitario de la unidad de Salud Mental rechazó la versión ofrecida por la dirección del complejo hospitalario y recriminó el propósito de ésta de desinformar a la opinión público. CCOO denunció que el cambio de ubicación en este área ha provocado que el personal que atiende a los pacientes agudos -los que requieren una atención constante por la singularidad de sus patologías- "se encuentre totalmente desbordado", ya que han de atender todos los ingresos que se producen en la planta, los traslados, las situaciones de crisis de los pacientes, etc... mientras que el trabajo anteriormente se repartía entre los trabajadores de ambas alas de la planta.