La delegada de Salud de la Junta de Andalucía, María Isabel Baena, defendió ayer que este año no se ha introducido "ninguna diferencia con respecto al año" en los referente a asistencia en verano en centros de salud y hospitales. "Llevamos varios años en la misma dinámica", apuntó. Así, explicó que el Servicio Andaluz de Salud (SAS) trata de utilizar los sistemas de información para tomar decisiones "y es real que por la tarde una consulta de Atención Primaria baja la frecuentación hasta un 80%". Por ello, de los 141 centros de salud de la provincia, sólo abrirán en verano por las tardes 37 (el resto del año son 57). En la capital serán tres centros más los puntos de Urgencias de Carlos Castilla del Pino y el de Sector Sur.

Respecto al cierre de camas hospitalarias, "la explicación tiene que ver con la experiencia en los datos de utilización". Este año un 15% de ellas se quedará "en reserva" mientras que en 2014 fue un 16%. "Son muchos años de experiencia en el sistema sanitario para saber cómo podemos ser eficientes cuando llega el verano", aseveró. A ello añadió que "cualquier ciudadano que necesite un recurso sanitario lo va a tener" y "si fuera necesario utilizar camas cerradas, se pondrían en marcha desde el primer minuto".

Sobre las quejas de los sindicatos por el bajo número de contratos de sustituciones, Baena destacó que "siempre son insuficientes". Por un lado, explicó que los especialistas "nunca se han sustituido" porque son "personas absolutamente expertas", por lo que "no tiene nada que ver con la crisis". En otro aspecto, reconoció que "hemos pasado años muy complicados de sustituciones, el pasado lo fue y éste hemos hecho un mayor número de contrataciones". En definitiva, se trata de "buscar el equilibrio de ser eficiente en un momento de complicación económica".