Prácticamente el 100% del turismo que visita la ciudad de Córdoba pasa por la Mezquita-Catedral y ese turismo inyecta anualmente unos 300 millones de euros en la economía de la provincia -concretamente 296,8 millones-, cifra que equivale al 1,05% del PIB cordobés. Estos datos son sólo una muestra de los reflejados en el informe denominado Impacto Económico del Conjunto de la Santa Iglesia Catedral de Córdoba, que ha elaborado la Universidad Loyola Andalucía a petición del Cabildo Catedralicio. Dicho documento, presentado justo unas horas después de que la Justicia haya dado carpetazo a las denuncias penales por las inmatriculaciones de la Iglesia en Córdoba -entre ellas la del monumento-, también revela que la Mezquita-Catedral "triplica cada euro que gasta el turista cuando visita la ciudad y lo revierte en actividad económica productiva para la capital y la provincia, con una repercusión positiva en todas las ramas de actividad", detalló ayer el director del equipo investigador que ha realizado el estudio, Alejandro Cardenete, quien insistió en que aunque dicho estudio se ha confeccionado tomando como base el año 2013, "sus datos tienen una validez de cinco años y son extrapolables a 2014 y 2015". "Ya sabíamos que la Catedral es el motor económico de la ciudad y hemos querido demostrarlo de una manera científica con este estudio", indicó el deán presidente del Cabildo Catedralicio, Manuel Pérez Moya, quien insistió en que el uso religioso del monumento ha contribuido a su conservación. Es más, incidió en que la Unesco ratificó que ese uso religioso [desde hace ya 775 años] "ha asegurado el bienestar del templo".

Para ahondar en esta inyección millonaria en la economía provincial, Cardenete detalló que durante 2013 el monumento Patrimonio de la Humanidad recibió más de 1,4 millones de visitas, "y generó unos ingresos en taquilla de más de 9 millones de euros, siendo uno de los monumentos más visitados a nivel nacional, regional y, especialmente, local, así como aglutinando el 50% de las visitas a la oferta patrimonial y cultural de la ciudad de Córdoba".

El informe explica asimismo que estos ingresos revertieron en la economía provincial, por un lado, vía pago de sueldos y salarios, compra de materiales, obras y repararaciones, entre otras actividades; y por otro, las visitas turísticas motivaron un incremento de la demanda en otras ramas de actividad como, por ejemplo, la hostelería y la restauración, el comercio y los servicios de transporte y de ocio. Para estimar el impacto de esta inyección o shocks de demanda sobre la economía provincial se ha empleado un modelo económico multisectorial, elaborado a partir de una base de datos estadística denominada Matriz de Contabilidad Social (MCS), que recoge las transacciones económicas entre los distintos sectores productivos y agentes económicos (hogares, empresas, sector público y sector exterior). El volumen monetario del shock de demanda presenta un doble componente: el del propio conjunto monumental y el del turismo cultural que atrae. El primer componente se ha cifrado en 7,96 millones de euros, distribuidos entre sueldos y salarios (49%) y compras de bienes y servicios (51%), según los datos presupuestarios del Cabildo Catedralicio. En cuanto al segundo componente, la demanda generada por los turistas culturales en Córdoba se ha estimado en 97,34 millones de euros para el año 2013, de los cuales 66,3 millones corresponden a turistas nacionales y 31,04 millones a turistas extranjeros. Además, el informe puntualiza que la suma de las estimaciones realizadas eleva a 105,3 millones de euros el shock de demanda o gasto generado, tanto por el conjunto monumental, como por el turismo que visitó la ciudad atraído por el mismo. Este montante se distribuyó entre el pago de sueldos y salarios (3,7%) y el consumo (96,3 %) de bienes y servicios.