Córdoba

El PP impugnará 11 mesas y todos los votos nulos

  • Ciudadanos reconoce que sigue teniendo dudas sobre las posibilidades de iniciar el proceso

El PP anunció anoche que ha tomado una decisión firme y finalmente impugnará 11 mesas y los votos nulos, pues entiende que exstien irregularidades suficientes para ello. Ciudadanos, por su parte, todavía sopesa la posible impugnación de varias mesas electorales ante las dudas surgidas el miércoles tras el recuento de los votos por la Junta Electoral de zona. Tienen de plazo hasta hoy a las 12:30 por lo que se apurará hasta el último momento y se mantendrán reuniones hasta última hora para decidir si se da el paso o no. El coordinador de campaña de Ciudadanos, Salvador García, aseguró ayer que "tenemos muchas dudas y nada claro" sobre una posible impugnación y apuntó que "posiblemente" no darán el paso, aunque habrá que esperar a la jornada de hoy.

En el PP, por su parte, estaban ayer en la misma situación de incertidumbre, al final de la noche se optó por el sí. La decisión, no obstante, era complicada, ya que hay pocas expectativas de que la situación vaya a cambiar e iniciar este proceso puede incluso perjudicar la imagen de estos partidos.

El recuento de votos que se llevó a cabo el miércoles en la Audiencia Provincial no ha provocado ningún cambio, para malestar de partidos como Ciudadanos -aspiraba a ganar un edil más-, al igual que el PP, en detrimento de que el PSOE perdiera uno. Sin embargo, el resultado se ha quedado igual, a pesar de que todos los partidos han arañado algún que otro voto más a diferencia de los resultados oficiales del domingo, cuando el recuento se quedó en un 99,40% del total. Con todo ello, el PP mantiene los 11 concejales, mientras que el PSOE continúa con sus siete. Ganemos Córdoba sigue con cuatro ediles, los mismos que IU, mientras que Ciudadanos se queda con dos concejales y UCOR con uno.

El PP tenía bastante esperanzadas depositadas en esta operación, cuyo ejemplo más cercano ocurrió en las pasadas elecciones autonómicas, cuando, tras una denuncia de Vox en Sevilla, se realizó un segundo recuento que arrojó que había 1.300 votos más que en el primero, lo que sembró dudas sobre cómo se había realizado y anotado todo ese proceso. Fue la propia Junta Electoral Central la que ordenó que se realizara ese recuento de nuevo.

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