La delegada de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de la Junta en Córdoba, María Isabel Baena, negó ayer con rotundidad que la plantilla del Hospital Universitario Reina Sofía, formada por más de 5.000 profesionales, sufra precariedad laboral, tal y como denuncian al unísono los sindicatos sanitarios. Como argumento, la socialista se basó en la última decisión del Servicio Andaluz de Salud (SAS) centrada en los profesionales eventuales estructurales. Tal y como dijo, desde el pasado 1 de marzo los contratados dentro de este colectivo al 75% desde hace dos años, volvieron a firmar un contrato con el 100% del sueldo y de la jornada laboral.

Baena insistió, durante una visita al centro de Salud del Sector Sur, en que no puede compartir con los colectivos sindicales que el hospital sufra precariedad laboral, aunque consideró que es "absolutamente legítimo que jueguen su papel". "Me parece importante que lo hagan y es una garantía de que vivimos en un Estado Democrático", recalcó la delegada. Asimismo, Baena defendió la gestión realizada por la Dirección Gerencia del centro hospitalario cordobés. "Me consta que todos los gerentes están intentando dar la mejor calidad asistencial", dijo la delegada, aunque reconoció que quedan "problemas por resolver todos los días, evidentemente, pero el mejor dato que podemos tener es la percepción de los ciudadanos y la satisfacción de la atención".

En cuanto a la relación de la actual gerente del centro, Marina Álvarez, con los sindicatos, Baena señaló que "no me cabe duda de que los gerentes mantienen una relación permanente con las fuerzas sindicales, porque es nuestra obligación". Esta percepción, sin embargo, no la comparten los propios colectivos sindicales que ayer mismo solicitaron, después de la constitución de la Junta de Personal del Hospital, una reunión "urgente" con la Dirección del hospital.

Los sindicatos sanitarios -SAE, Satse, CCOO, CIS-F, SMA y UGT- por primera vez han acordado unir sus fuerzas para conseguir una solución a la situación que padece el hospital en estos momentos. En este sentido, denuncian, por ejemplo, un déficit de personal en el centro. En la actualidad la plantilla del Reina Sofía está compuesta por unos 5.200 profesionales, de modo que se tendrían que realizar en torno a unos 500 contratos para que "el funcionamiento sea correcto".

En la actualidad, según insistieron en rueda de prensa los representantes de los colectivos sindicales sanitarios, el índice de contratación del hospital no supera el 15%, lo cual genera un "déficit arriesgado de personal en la totalidad de las áreas". Esto a su vez provoca que los profesionales tengan que hacer frente a una mayor carga laboral, que da como resultado que "trabajen al límite" durante "jornadas maratonianas de más de siete horas" en servicios de "especial sensibilidad", como por ejemplo, en los quirófanos. Asimismo, los sindicatos se quejaron de la movilidad entre unidades de los profesionales, debido al déficit de personal.