El aeropuerto ha vuelto a convertirse en un arma arrojadiza y punto de desencuentro entre las formaciones políticas, todo después de que el Tribunal de Cuentas de la Unión Europea apuntara esta semana lo que para muchos era una evidencia: que la ampliación del aeródromo se realizó sin informes favorables que aconsejasen esa millonaria inversión. El alcalde, José Antonio Nieto se refirió ayer a esta cuestión y aseguró que la "mala inversión" realizada en la ampliación de la pista es un caso "tan grave o más" que el del "famoso aeropuerto de Castellón" y que, si no ha salida más en los medios de comunicación, "es porque la decisión la tomó una alcaldesa de IU con el apoyo del PSOE". Se da la circunstancia de que el aeropuerto de la comunidad valenciana se considera uno de los mayores ejemplos de derroche de dinero público y que estuvo impulso por el entonces presidente de la Diputación de Castellón, Carlos Fabra (PP), que ahora está en la cárcel por fraude fiscal. El aeropuerto Costa-Azahar se inaguró en 2011 tras una inversión millonaria pero no ha sido hasta hace unos días cuando ha recibido los permisos para recibir vuelos.

Nieto insistió en que el caso de Córdoba, "como lo impulsaron con una ministra del PSOE, Magdalena Álvarez, el problema era menor" pero "si en vez de ser un alcalde de IU apoyado por el PSOE, hubiese sido un alcalde de otro partido político, probablemente este caso sería tan grave o más que el famoso aeropuerto de Castellón". El regidor también apostilló que el aeródromo castellonés "va a empezar a operar ya".

El alcalde recordó que la postura del PP fue que se construyera uno nuevo "de manos de la iniciativa privada" ya que hubo una propuesta que llegó "formalmente" al Ayuntamiento y que era viable porque se estaba en plena época "de bonanza económica". Para Nieto, esa solución era la más apropiada porque "los posibles riesgos de la operación los asumía la iniciativa privada y no los cordobeses a través de sus impuestos". Además explicó que la ampliación de la pista le pareció "poco inteligente" ya que la infraestructura se encontraba en "zona inundable" por lo que "se limitaba la longitud de la pista y se impedía que hubiera ciudad aeroportuaria". Durante ese proceso en el que se planteó la construcción de una infraestructura nueva o la ampliación de la actual, Nieto recordó que "hubo dos plenos en los que se debatió este asunto y en los dos el PSOE e IU dijeron que mientras ellos tuvieran alguna responsabilidad no habría aeropuerto privado en Córdoba" sino que sería un equipamiento "público". Esta decisión ha terminando en una inversión de 85 millones de euros "y solo el 40% de la obra ejecutada" por lo que el alcalde prevé que el presupuesto total de los trabajos alcance los 170 millones de euros.

Una de las objeciones que hace el informe del Tribunal de Cuentas de la Unión Europea (TCE) es el escaso movimiento de pasajeros que alberga (7.000 en 2013) al no contar con ninguna aerolínea que opere desde la pista cordobesa. En este sentido, el alcalde "confío" en que la Junta de Andalucía "deje de decirle a los demás lo que tiene que hacer y ellos hagan algo" porque, apuntó, es la Administración autonómica quien tiene las competencias en la gestión turística en relación a la atracción de aerolíneas a la capital cordobesa. Así, criticó que "la Junta no hace una propuesta y no se compromete a nada", lo que "nos lleva a todos a la melancolía y aporta muy poco". No obstante, el alcalde no detalló si se ha producido algún avance en las negociaciones para conseguir la implantación de una empresa en la pista cordobesa, ya que en su día se apuntó que el Ayuntamiento estaba en conversaciones para atraer rutas con origen y destino Córdoba. Lo que sí dijo es que "hay que aportar soluciones y compromiso y desde el Ayuntamiento se va a hacer".

El caso del aeropuerto cordobés se incluye junto a otros 20 más en distintos estados de la Unión en un estudio en el que se alerta de la escasa rentabilidad de las inversiones financiadas por la Unión Europea en aeropuertos dentro de su territorio, ya que "no generaron los resultados esperados". La UE financió con casi 13 millones la ampliación de la pista y ahora "es raramente utilizada" y el espacio del que dispone "es usado como aparcamiento de aviones no comerciales", según apunta el informe del Tribunal de Cuentas europeo.