Desde inicios de 2014 y hasta el 30 de junio se han recibido en la provincia de Córdoba 773 denuncias por violencia de género, según informó ayer la Jefa de la Unidad contra la Violencia sobre la Mujer, Mª José León. Una cifra elevada pero que dista mucho de los datos recogidos en el mismo ejercicio de 2013, con respecto a los que se registra un descenso de en torno al 9%. No obstante, fueron 58 los casos en los que la mujer denunciante renunció a continuar con el procedimiento judicial a causa, según el subdelegado del Gobierno, Juan José Primo Jurado, "del desconocimiento del procedimiento penal, la falta de recursos económicos, el miedo, la culpa o el chantaje del agresor", entre otros.

Como resultado de las denuncias de las mujeres que sufren violencia de género, en la actualidad hay 930 víctimas que cuentan en Córdoba con protección policial activa contra sus maltratadores. De ellas, casi la mitad tienen entre 31 y 45 años y diez son menores de edad. Desde inicios de año se han emprendido 247 órdenes de protección de las cuales 186 fueron adoptadas. En lo que va de año, la Unidad contra la Violencia sobre la Mujer ha realizado el seguimiento individualizado de 56 víctimas, de las cuales diez presentan riesgo extremo y 46 riesgo alto. Han sido enjuiciados 157 hombres de los cuales 112 fueron condenados, con índice de absolución del 28%. En toda la provincia existen 11 hombres que portan pulseras para agresores, que facilitan el control de los maltratadores que están sujetos a órdenes de alejamiento, y 553 mujeres reciben la renta activa de inserción, una ayuda extraordinaria para personas con necesidades especiales. Asimismo, las llamadas al Servicio de Atención Telefónica para las víctimas de violencia de género continúa su tendencia al alza con 789 llamadas, un 30% más que el año anterior.

Las medidas para frenar la lacra de la violencia machista resultan útiles pero a todas luces insuficientes para erradicar el problema. En lo que va de año, 45 mujeres han sido asesinadas en España por sus parejas o ex parejas, y de ellas, dos eran cordobesas. Mari Ángeles Sánchez, vecina de Pozoblanco, fue asesinada en enero; Ana Márquez, durante el mes de agosto, fue apuñalada en la localidad malagueña de Torrox, donde trabajaba como directora del Museo de Nerja. Ninguna de ellas había interpuesto denuncias contra sus agresores. De hecho, de las 45 fallecidas en todo el país, sólo en 14 de los casos existían denuncias previas por maltrato.

Según Primo Jurado, el trabajo de la policía en esta materia y las campañas de sensibilización lanzadas desde las instituciones son "adecuadas", pero el germen del problema reside en los núcleos familiares y en la educación. Es en ese estadio en el que "no estamos ganando la batalla" contra la violencia de género. En este sentido, animó a las familias a implicarse de forma activa y a no permitir ni reproducir estereotipos y comentarios machistas en el seno del hogar.

Los datos provinciales relativos a la violencia de género fueron facilitados ayer con motivo del Día Internacional de la Violencia de Género. Aprovechando dicha ocasión, el delegado del Gobierno mantuvo además una reunión con siete ayuntamientos de la provincia (Aguilar de la Frontera, Almodóvar del Río, Espiel, Fernán Núñez, Santaella, Belmez y Villaviciosa) en la que las Jefaturas de la Policía Local de las localidades se adhirieron al Sistema de Seguimiento Integral de los Casos de Violencia de Género. Ya ascienden a 28 los municipios adscritos a este servicio. Posteriormente se guardó un minuto de silencio a las puertas de la Subdelegación del Gobierno en recuerdo de las mujeres asesinadas, un episodio que se repitió en las sedes de la Delegación de la Junta de Andalucía y en las de instituciones como Cruz Roja. Distintas plazas de la ciudad acogieron también actos de recuerdo y respeto a las vítimas protagonizados por distintos centros educativos. Asimismo, el Ayuntamiento celebró un Pleno Extraordinario con motivo del Día Internacional de la Violencia de Género.