Córdoba

Cita histórica con los mártires de la ciudad

  • La Hermandad de la Misericordia lleva las reliquias de los Santos Mártires hasta la Catedral, un hecho que no ocurría en los últimos 75 años en Córdoba

La barriada de San Pedro vivió ayer un acontecimiento histórico, ya que la hermandad de la Misericordia sacó a a la calle la urna con las reliquias de los Santos Mártires con motivo de la conmemoración del 775 aniversario de la Catedral. A pesar de que la meteorología no acompañó del todo, la procesión salió sobre parihuelas y bajo mazas a las 10:00 de la iglesia de San Pedro, desde donde los fieles, con cirios rojos en señal a la sangre que derramaron los mártires por la fe, acompañaron a la urna hasta la Catedral.

El cortejo se dividió en tres tramos, el primero formado por los más jóvenes de la hermandad, el segundo correspondiente a los miembros más activos y el último con los veteranos de la cofradía, reservado para aquellos que llevan en ella más de medio siglo. Uno de los aspectos que más llamó la atención y sorprendió en la calle fue el hecho de que la Corporación municipal acompañara al cortejo bajo mazas, un sistema que se utilizó la primera vez que las reliquias de los Santos Mártires salieron a la calle y que ayer se volvió a repetir.

La urna, confeccionada a principios del siglo XVIII por Cristóbal de Soto y financiada por el Ayuntamiento, pasó por lugares emblemáticos de la ciudad como la calle Lucano o la plaza del Potro hasta que alrededor de las 11:30 llegó a la Catedral. Este momento, justo a la entrada de la Puerta de Santa Catalina, fue uno de los más emotivos de la mañana en el que, además, sonó la Marcha Real. Fieles y turistas despistados observaron la escena bajo una tímida lluvia, probablemente sin saber que se encontraban ante un acontecimiento que no ocurría en los últimos 75 años en la ciudad.

Una vez en el interior del principal templo de la Diócesis, alrededor del mediodía, dio comienzo la misa, presidida por el obispo, Demetrio Fernández. La celebración también contó con el acompañamiento de la capilla musical de la propia hermandad de la Misericordia. Una vez concluido el oficio, la cofradía de San Pedro inició el camino de vuelta con la urna hacia su templo matriz, en un regreso que volvió a sorprender a los viandantes, dado la solemnidad de esta procesión más que histórica para Córdoba.

El cortejo procesional también contó con la presencia de tres hermandades invitadas: la de San Rafael, por la vinculación histórica con las reliquias de los Santos Mártires; la de la Buena Muerte, que da culto a la Reina de los Mártires; y la del Socorro, que forma parte de la feligresía de San Pedro.

En una jornada histórica como la de ayer, el paso con la urna llevó un exorno de tulipas cedido por la Hermandad del Santo Sepulcro, y jarras florales y violeteros de la Cofradía de la Buena Muerte, que también cedió igualmente algunas de las dalmáticas que llevaron los acólitos.

Sin duda, la procesión fue un acontecimiento histórico tanto para la hermandad de San Pedro, como para Córdoba, ya que desde 1939 no se trasladaban las reliquias de los Santos Mártires en procesión hasta la Catedral. En aquella ocasión las reliquias de los Santos Mártires presidieron una misa junto con la Virgen de la Fuensanta y la imagen de San Rafael tras el final de la Guerra Civil. La fundación de la Hermandad de los Santos Mártires surgió a raíz del descubrimiento de las reliquias que hoy se conservan en una urna de plata. Después se fusionó con la Hermandad del Santísimo Sacramento y en el año 2000 con la de la Misericordia. Los restos de los Santos Mártires se descubrieron en unas obras que se realizaron en San Pedro en 1526 para hacer un refuerzo de cimentación. Se encontraban en una cripta a la que le faltaba una pieza que estaba con los nombres de todos los que allí estaban enterrados de época romana y musulmana, en un antiguo monasterio dedicado a los Santos Mártires que estaba donde hoy está la ermita de los Mártires. Allí se guardaba la tapa de la cripta.

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