El 19º Congreso Nacional Farmacéutico comunicó ayer las demandas y objetivos del sector recogidos en la Declaración de Córdoba, un documento en el que la profesión se compromete con la farmacia comunitaria "para mejorar la atención a los pacientes, apostando por la profesionalidad, la práctica asistencial y el trabajo colaborativo con otros profesionales sanitarios", expuso Carmen Peña, presidenta del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos.

Así, esta declaración tiene como primer punto avanzar en la activa participación de la farmacia comunitaria con el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad y las Consejerías de Salud de las comunidades autónomas "en el proceso de reformas del Sistema Nacional de Salud, ofreciendo una farmacia renovada, profesional y sostenible".

Además, los asistentes han acordado en este congreso, que finalizará hoy en el Parador de la Arruzafa, la promoción de la integración de la farmacia comunitaria y la intervención del farmacéutico en los planes y estrategias del Ministerio y las Consejerías de Sanidad, "implicándolas en la promoción de la salud, la prevención de la enfermedad y el seguimiento farmacoterapéutico".

Por otra parte, resaltaron la importancia de desarrollar la labor asistencial a partir de la farmacia comunitaria en el ámbito sociosanitario, "tanto en la atención farmacéutica domiciliaria al paciente como en la atención farmacéutica en centros sociosanitarios". También abogan por participar en la e-Salud, "impulsando el necesario acceso de los farmacéuticos comunitarios al historial farmacoterapéutico del paciente, con el registro de intervenciones, en un sistema interoperable y que favorezca la comunicación entre los profesionales". Además piden un impulso en "la calidad en la dispensación de los medicamentos de autocuidado por internet a través de las farmacias".

La Declaración de Córdoba incide también en el valor estratégico del medicamento, con y sin receta, y de su dispensación en la farmacia comunitaria "para asegurar su calidad y accesibilidad a la población, incluyendo los medicamentos de innovación (biológicos, biosimilares, etc) que por sus características sean de uso ambulatorio para el paciente".

En este documento, el sector solicita la promoción del desarrollo profesional continuo de los farmacéuticos y se compromete a apoyar a las universidades para que los contenidos de la formación de grado se adapten a la práctica asistencial.

Antes de la lectura de la declaración se celebraron dos mesas redondas sobre Farmacia comunitaria: punto de partida y futuro y Construimos la farmacia del futuro, así como una ponencia de la presidenta del Consejo General de Colegios Farmacéuticos, Carmen Peña, sobre Un nuevo horizonte para la Farmacia Comunitaria.

En la primera mesa intervino Héctor Castro, presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de La Coruña, que señaló que "el nuevo perfil de paciente requiere de una serie de nuevas necesidades que la farmacia comunitaria puede y debe satisfacer". Por su parte, Rosa López-Torres, presidenta del Colegio de Farmacéuticos de Albacete, indicó que "la nueva sanidad, el nuevo paciente y los nuevos medicamentos requieren de una farmacia renovada, profesional, asistencial, comprometida, enfocada a resultados y necesariamente viable". Pedro Rivero, presidente del Colegio de Farmacéuticos de Álava, que también participó en esta mesa, destacó que "el futuro de la farmacia comunitaria pasa por la prestación de servicios profesionales farmacéuticos que deben prestarse de manera integrada en el sistema sanitario y de forma coordinada con otros profesionales de la salud, manteniendo su identidad y ajustándose a las competencias profesionales de los farmacéuticos".

La segunda mesa redonda profundizó en los aspectos prácticos para construir la farmacia comunitaria del futuro. Ramón Jordán, presidente del Colegio de Farmacéuticos de Zaragoza, argumentó que "tanto la legislación como diferentes recomendaciones recogen una evolución en las competencias de los farmacéuticos que debemos promover y asumir en beneficio de ciudadanos, pacientes y sistema". Por su parte, Pilar García, presidenta del Colegio de Farmacéuticos de Navarra, insistió en que "la integración de la farmacia comunitaria como establecimiento sanitario" y destacó que los planes y estrategias de salud pueden ser un importante punto de partida para favorecer su desarrollo. Por último, José Espinosa, presidente del Colegio de Farmacéuticos de Zamora, manifestó que "en la construcción de la farmacia comunitaria del futuro se requiere de alianzas estratégicas con los principales actores de nuestro entorno, estableciendo objetivos comunes, siendo proactivos y aprovechando sinergias".

En la jornada de hoy el congreso analizará experiencias asistenciales de farmacia comunitaria, el valor de la dispensación farmacéutica, la adherencia a los tratamientos, la integración del sector en los planes de salud y las estructuras colegiales como servicio a los profesionales y a la sociedad.