Los cines de verano forman parte del patrimonio de todos los cordobeses y cada época estival se llenan por las noches de aquellos ansiosos por disfrutar de una buena película y el fresco que da la noche. Todos ellos se concentran en el casco antiguo -Limpia, Delicias, Coliseo y Fuenseca-, a excepción de uno: el cine de la plaza de toros. El Coso de los Califas aporta la nota distinta a una tradición que puede tener los días contados. Y es que el paso de la proyección en 35 milímetros a la digital, puede suponer el fin de este mítico cine.

Tal y como explica a El Día el gestor de este cine, Francisco Javier Gómez Martín, el desembolso que hay que hacer para adaptar el cine a los nuevos formatos de las películas que vienen es bastante costoso, por lo que aún no tienen seguro que vayan a poder hacer frente al pago y, por lo tanto, continuar con las proyecciones como vienen haciendo desde el año 2000.

En concreto, Gómez Martín habla de en torno a 60.000 euros para asumir el coste del proyector digital, dinero que están intentando conseguir a través de distintas vías de financiación. "Barajamos la posibilidad de pedir el dinero al Instituto de Crédito Oficial (ICO), usar el método del renting o acudir a los Fondos Europeos de Desarrollo Regional (Feder), como ya han hecho otros cines de verano de Córdoba", comenta el empresario.

Por el momento, anoche proyectó su última película y cerró las puertas a expensas de saber qué pasará el año que viene. A pesar del alto coste y de lo difícil del cambio, Gómez Martín se muestra "optimista" y espera conseguir la recaudación necesaria para que el cine de verano de la plaza de toros siga poniendo la nota diferente a estos lugares tan característicos.

Este apagón analógico entrará en vigor a partir del 31 de diciembre y obligará a todas las salas a asumir el cambio hacia la proyección digital. En Córdoba son dos los cines de verano que ya se han adelantado y desde principios de agosto ya proyectan sus películas en el formato más moderno. Se trata de los cines Delicias -entre San Lorenzo y el Rescatado- y el Coliseo San Andrés. En ambos casos, la empresa que los gestiona, Cinemas S. A., obtuvo una subvención con cargo a los fondos Feder, posibilidad que comentaba Gómez Martín.

Aunque son muchos los que alaban las mejoras en la proyección digital, también hay quien augura pérdidas de empleo, ya que si el 35 milímetros obligaba a realizar una serie de trabajos más elaborados, con la nueva proyección lo único que habrá que hacer será apretar un botón.