Córdoba

La mitad de las autopsias tienen como origen una muerte violenta

  • Durante el año 2012 se examinaron en el Instituto de Medicina Legal de Córdona 308 cadáveres 160 casos se refieren a personas que fallecieron a causa de accidentes fortuitos

Casi una autopsia al día. Ése es el volumen de trabajo que soportan los patólogos forenses del Instituto de Medicina Legal (IML) de Córdoba, quienes practicaron durante el año pasado un total de 308 autopsias. De este modo, la provincia se sitúa como la quinta provincia en el examen de cadáveres, con una representación del 7,9% en el global andaluz, fijado en 3.879 intervenciones.

Según el ranking que se desprende de los datos sobre la actividad forense facilitados por la Consejería de Justicia e Interior de la Junta de Andalucía a este diario, el último lugar lo ocupa la provincia de Huelva (199 autopsias), a la que le sigue de cerca Almería, con 227 autopsias (5,8%); luego, las de Jaén, con 230 (5,9%), y Córdoba, con 308 (7,9%). Encabezan la lista las provincias con mayor densidad de población: Málaga, con un total de 896 autopsias (23,1%); Sevilla, con 856 (22%); Granada, donde se practicaron 584 exámenes forenses (15%), y Cádiz, donde se hicieron 579 (14,9%).

De las 308 autopsias que se llevaron a cabo en el Servicio de Patología del IML de Córdoba, más de la mitad tenían como origen una muerte violenta. De hecho, según la estadística, 160 resultaron ser accidentales, homicidas o suicidas (las tres tipologías contempladas), el 52% del total.

Aunque no se especifica detalladamente por provincias, sí basta con echar una ojeada a la etiología médico-legal de las muertes violentas en Andalucía -donde se registraron 1.906 tras el examen de los cadáveres- para percatarse de un detalle significativo: el 42% de ellas fue un suicidio. Esto son más de 1.600 en la comunidad autónoma durante el ejercicio pasado, una media superior a los 130 casos cada mes. La crisis económica y sus terribles consecuencias están, en muchas ocasiones, detrás de estos lamentables sucesos. No obstante, los más numerosos fueron los fallecimientos accidentales, concretamente el 53%, mientras que el 5% que resta (aproximadamente) correspondió a asesinatos y homicidios.

Del análisis de los datos aportados por la Junta se desprende que la provincia donde más muertes violentas inventariaron los forenses del Instituto de Medicina Legal fue la de Málaga, con 444 (el 49,5% del total de autopsias materializadas). La provincia cordobesa se sitúa otra vez en el quinto lugar en este apartado, aunque supera en dos puntos a la proporción media andaluza (49,1% de fallecimientos violentos) con respecto a la muerte natural.

El segundo territorio andaluz con más fallecimientos de esta índole es Sevilla, donde se registraron el año pasado 382 (44,6% del total), al que siguen Granada, con 323 (55%); Cádiz, con 220 (37,9%); Córdoba y sus 160 (51,9%), Jaén, con 139 (45,1%), y Almería, con 137 (el 60,3%, el récord regional).

La otra mitad de la estadísticala completan las muertes por causas naturales, es decir, aquellas que son el resultado final de procesos morbosos, sin intervención de fuerzas extrañas, ajenas al organismo. En Córdoba perecieron en 2012 de forma natural 140 de los cuerpos examinados por el equipo de patólogos forenses -encargado también de la identificación delos cadáveres-. En Andalucía se contabilizaron 1.728 fallecimientos de este tipo. Sólo en ocho casos cordobeses los forenses no pudieron determinar qué llevó a esas dos personas a la muerte, según la estadística de la Consejería de Justicia e Interior de la Junta de Andalucía.

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