Los Especialistas Internos Residentes (EIR) continúan con la huelga indefinida que iniciaron el lunes, protesta que ha provocado una sobrecarga de trabajo en complejos como el Hospital Reina Sofía, donde los jefes de servicio han pedido a los directivos que negocien con los médicos para que se acabe el conflicto. Esta semana, la plantilla ha tenido que hacer frente al trabajo que le correspondía a los residentes, de modo que las jornadas de trabajo se han multiplicado. El problema reside, según explicaron a este periódico las fuentes consultadas, es que la plantilla real con la que cuenta el SAS en la provincia es "insuficiente" y que el trabajo en estos momentos se mantiene, pero teniendo que repartirlo entre muchas menos personas. Esta situación ha derivado en que los jefes de servicio -que hasta ahora se habían mantenido al margen de todas las protestas realizadas por los profesionales sanitarios- hayan pedido la Gerencia y al Servicio Andaluz de Salud que negocie con el colectivo para encontrar una solución. El viernes se produjo una reunión informal en Sevilla en la que, según las fuentes consultadas, la directriz de la Junta fue que se pusiera fin a la huelga para negociar, algo a lo que no están dispuestos los EIR. De hecho, los especialistas residentes quieren tener una propuesta encima de la mesa antes de terminar con las movilizaciones.

Ayer se produjo otra original protesta del colectivo, que se concentró en el entorno del Puente Romano. Una vez allí, se tumbaron. Después, iniciaron una marcha hasta el Centro para exigir una aplicación equitativa de los recortes. El seguimiento de la huelga sigue siendo mayoritario y el colectivo quiere incrementar la presión para conseguir que el SAS se siente. Estos profesionales en formación denuncian que llevan a cabo tareas formativas e investigadoras "fuera" de su jornada laboral "sin retribución ni reconocimiento alguno". Además, la aplicación del aumento de la jornada laboral, según su opinión, "esconde, en realidad, una rebaja retributiva". Denuncian, además, que esta medida se ha realizado de manera "impositiva", sin negociación y sin que exista "equidad" entre los residentes.

La huelga llega después de que estos profesionales sanitarios en formación hayan intentado en varias ocasiones llegar a un punto de encuentro con la dirección del Servicio Andaluz de Salud (SAS) y continuarán con el paro hasta logran un punto de entendimiento. Así las cosas, los residentes continuarán sin ejercer y sin recibir formación.

En el resto de provincias andaluzas el seguimiento de la huelga también está siendo masivo. De hecho, en Sevilla el colectivo de residentes se ha encerrado para exigir una negociación con el SAS. En Córdoba, los profesionales en formación continuarán con sus protestas hasta que no consigan el entendimiento con la Administración.