Córdoba

El SAS rechaza que la jornada de 37,5 se aplique con media hora más al día

  • Los colectivos profesionales consideran que la intención de la Junta es reunir el incremento de 2,5 horas en un único turno de tarde tras acumular una semana

Aprobado el Plan Económico y Financiero de la Junta de Andalucía, un programa que comprende severos ajustes al personal sanitario tanto en el capítulo económico como en el laboral, se abre el periodo de las discrepancias a la hora de aplicar los cambios. Según la información facilitada a El Día por integrantes de la mesa sectorial -en la que están presentes los sindicatos-, el Servicio Andaluz de Salud (SAS) aún no ha concretado la fórmula que utilizará para llevar a cabo la jornada de 37,5 horas semanales, una decisión que supondrá un incremento de 2,5 horas. De momento, como desvelaron estas mismas fuentes, el ente público ha rechazado la propuesta de que esas 2,5 horas de más se apliquen a diario; es decir, o bien que la jornada empiece un cuarto de hora antes y acabe un cuarto de hora después o bien que los profesionales trabajen media hora más a la entrada o a la salida del servicio.

Aunque la jornada de 37,5 horas sentó mal -mucho- en el seno de la mesa sectorial, que rechazó de manera frontal tanto ésta como otras medidas que forman parte del plan de ajustes de la Junta, este órgano de representación sindical no quiere ceder en lo que respecta a la aplicación del nuevo sistema de horas. Actualmente, el horario establecido es de 08:00 a 15:00 (mañana) y de 15:00 a 22:00 (tarde), unas franjas en las que no aparecen incorporadas las 2,5 horas de más que marca el SAS. El personal sanitario, que quede claro, no se niega a trabajar más, pero sí es partidario -y no parece dispuesto a ceder- de que los ajustes diarios se lleven a cabo a diario, de manera que el acceso al centro se haga, por ejemplo, a las 07:30 en lugar de a las 08:00.

La mesa sectorial, según fuentes consultadas, ha recibido, sin embargo una consigna aún oficiosa -de momento verbal-, de que la aplicación de la jornada de 37,5 horas se haga mediante "acúmulos" y no de forma diaria como han planteado algunos sindicatos. Este sistema consiste en que los profesionales vayan acumulando estas horas semanal o quincenalmente, de manera que puedan reunir horas suficientes para trabajar durante una jornada de 2,5 o 5 horas por la tarde. De esta manera, entiende el personal al que accedió este medio de comunicación, el SAS cubriría las carencias de personal que tienen en esta franja.

El motivo que argumenta el SAS para rechazar esta propuesta es, según los datos aportados, que una modificación del horario de los centros -el más común sería de 08:00 a 07:30 en el turno matinal- "conllevaría más gasto" al ente público. Este criterio explica que la Junta pretenda convencer a los sanitarios para que acumulen las horas en una misma jornada, de 2,5 horas si el acúmulo es sólo de una semana, o de 5 si es de dos.

De la aplicación de las 37,5 horas semanales depende la puesta en marcha de la reducción de jornada del personal con contrato temporal, eventual o interino en un 10%, un 5% menos de lo que tenía previsto la Junta cuando puso sobre la mesa el primer documento del plan de ajustes, que incorporaba un 15% menos de jornada y, por tanto, de sueldo para estos trabajadores. De hecho, el propio SAS ha dicho que, a falta de un nivel de contrataciones similar al de los últimos años, con las 2,5 horas de más de sus empleados fijos pretende paliar ese 10% menos de los eventuales.

La mesa sectorial tampoco se ha olvidado de una de sus previsiones más pesimistas, que consiste en que no acaba de creerse que el SAS haga todos estos cambios para evitar los despidos. Fuentes del Sindicato de Enfermería (Satse), el Sindicato Médico (Simec) y CCOO en su parcela sanitario ya apuntaron a este medio que están convencidos de que la Consejería de Salud prescindirá de manera progresiva de empleados eventuales, tanto los que trabajan en hospitales, como los de los centros de salud y las agencias sanitarias -en Córdoba las de Peñarroya, Montilla y Puente Genil- como consecuencia directa de los recortes y para garantizarse el "ahorro".

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