Hasta un centenar de profesores asociados a la Universidad de Córdoba (UCO) pueden perder su puesto de trabajo el próximo curso a costa de la aplicación del real decreto 14/2012, el de los recortes. Según las fuentes consultadas por El Día, se trata de una cuantía que se ha barajado ya en los últimos consejos de gobierno de la institución académica como consecuencia del citado decreto. Los profesores asociados no cuentan con una plaza fija en la Universidad sino que compaginan este trabajo con otro en la empresa privada. Por ello, los sueldos que perciben no llegan ni a los 600 euros. Normalmente, se trata de personas vinculadas al mundo empresarial y a las que recurre la UCO para, según las mismas fuentes, "acercar a los alumnos" al sector productivo.

La Universidad aún no ha dado a conocer cómo llevará a cabo la aplicación de los recortes -sólo ha dado a conocer que estudiará la manera de hacerlo-, aunque la primera consecuencia más evidente es el cambio en la organización de la carga de estudio que se está llevando a cabo en las facultades para amoldarse a las nuevas obligaciones del Ministerio de Educación al próximo curso, lo que está provocando el malestar entre el profesorado.

No en vano, uno de los principales cambios es el aumento de la carga docente. El decreto plantea adaptar el régimen de dedicación del profesorado universitario según si cumplen sólo con la función docente, investigadora o con ambas. Así, los funcionarios docentes sin sexenio en activo tienen que ampliar su dedicación máxima docente de 24 a 32 créditos por curso, según las citadas fuentes. Este aumento de horas para los titulares va en detrimento de los asociados y, en consecuencia, que se queden sin poder dar clases.

A todo esto se suma el hecho de que el profesorado de la UCO ya ha empezado a manifestar su rechazo a los recortes. Buena prueba de ello es el comunicado elaborado por el consejo del departamento de Informática y Análisis Numérico de la UCO, del pasado 2 de julio, en el que muestra "su apoyo incondicional a los profesores asociados a interinos" y considera que su labor es "imprescindible". "Su experiencia profesional aporta unas relaciones muy fluidas con la realidad social y productiva", añaden. Por ello, insisten en que estos profesores "no puede ser contemplado como meros reguladores de la carga docente" y señalan que "no se puede prescindir" de ellos. Es más, insisten en que su posible marcha va a suponer "un nimio ahorro" para las arcas universitarias.

En el documento, este departamento también critica "la paralización de las promociones del profesorado, que frenará el desarrollo de la carrera profesional del personal docente y, en el caso del profesorado a tiempo completo con contrato a término, supondrá dejar en la calle muchos que siguen su carrera profesional según los cauces establecidos por la legislación vigente".

Otra de las críticas que lanza este grupo de docentes se centra en el "incremento desproporcionado de las tasas", una medida que "atenta contra el principio básico de la igualdad de oportunidades". Por todo ello, muestran su rechazo a "la no renovación de contratos de profesores asociados e interinos, a los nuevos e injustos recortes salariales y al aumento de las horas de clase".