Priego de Córdoba y Montilla fueron los puntos de encuentro ayer del candidato del PP a la Presidencia de la Junta de Andalucía en las elecciones del 25 de marzo, Javier Arenas. En la ciudad prieguense, en un acto organizado por Nuevas Generaciones, el líder del PP se comprometió a que si gobierna la Junta de Andalucía entre sus prioridades estará no sólo la mejora de la carretera A-333, sino la construcción de un Centro de Alta Resolución Hospitalaria (Chare), una de las demandas históricas de la comarca de Priego y que incluso ha movilizado a algunas formarciones políticas para que se mejore la asistencia sanitaria de esta zona de la Subbética. De confirmarse este compromiso, el Chare de Priego sería el cuarto de la provincia de Córdoba, tras los de Puente Genil y Peñarroya-Pueblonuevo -en servicio- y el proyectado en Palma del Río.

El acto, que tuvo lugar en el Pabellón de las Artes de Priego, contó con la participación del alcalde de Córdoba, José Antonio Nieto, el presidente regional de Nuevas Generaciones, Luis Paniagua, y la presidenta nacional de NNGG, Beatriz Jurado, además de la alcaldesa de Priego y presidenta de la Diputación, María Luisa Ceballos. Arenas manifestó que una ciudad con las dimensiones y características de Priego no puede contar con "tan pocas infraestructuras sanitarias" y, además, recalcó "que hay que revitalizar el tejido industrial" para apostar por esos empresarios "que aún tienen ganas y hacen esfuerzos por emprender", así como la deficiencia en las comunicaciones por carretera que sufre la comarca.

Arenas dijo que "no se puede permitir que Andalucía se identifique con los escándalos de los ERE o el asunto de Invercaria" y pidió que "cuanto antes hay que pasar página de tantos abusos". El líder popular manifestó que la población está "harta de abusos y con ganas de oportunidades" e insistió en que si llega al Gobierno "seré presidente de todos los andaluces, de los que me hayan votado y de los que no", si bien matizó que las elecciones no están ganadas.

Javier Arenas criticó que el Ejecutivo andaluz ha sido "el único" que se ha opuesto al límite del déficit y exigió "una explicación", recordando además que el Gobierno de Griñán aceptó la propuesta del anterior Ejecutivo socialista del 1,3% de déficit y ahora "dice que no" a la propuesta de Mariano Rajoy del 1,5 % porque "se comportan en base a intereses de partido y electorales, sin pensar en el interés general de Andalucía".