María José Sánchez es consciente de que el sistema sanitario público andaluz es la joya de la corona de la autonomía y que hay que hacer todo lo posible por mantenerlo y mejorar su posición. Y para ello está dispuesta a no escatimar gasto. De hecho, aún con el gasto ajustado y la continuada reducción de los presupuestos, volvió a mantener ayer su compromiso en Granada por mejorar el empleo y las condiciones de los profesionales y también los servicios prestados a la ciudadanía desde la sanidad pública. No en vano, según un estudio de la OMS y la UE, los sistemas públicos alcanzan su máxima importancia en tiempos de crisis.

En cuanto al personal, la consejera de Igualdad, Salud y Políticas Sociales volvió a reiterar el compromiso anunciado este verano por la presidenta de la Junta, Susana Díaz, de mejorar en 2015 la situación laboral de unos 8.000 eventuales estructurales del SAS contratados al 75% de jornada y con reducción salarial y que se espera puedan volver a sus condiciones previas al recorte, lo que llevará un esfuerzo "presupuestario y organizativo". Según Sánchez, "más de 100.000 personas trabajan en nuestros centros. Son el rostro de la sanidad en la que la gente confía. Sabemos que trabajan en condiciones duras pero con la ampliación de la jornada laboral y la tasa de reposición del 10% se desequilibra el sistema", dijo Sánchez.

La consejera espera que los 600 millones de euros menos de presupuesto que recibirá Andalucía para 2015 afecten lo mínimo posible a los servicios y al personal pero con esa cantidad y contando con que el área de Salud, Igualdad y Políticas Sociales suma el 45,5% del presupuesto de la Junta, es de esperar que algo afecte.

"Vamos a luchar por un sistema público de salud en el que creen los profesionales, que sabemos que muchos están achicharrados. Desde el Gobierno de Andalucía y desde el Sistema Nacional de Salud tenemos que garantizar que el sistema sanitario sigue siendo el referente en el que creen los profesionales y vamos a trabajar priorizando presupuestos y políticas con el arte de lo posible", aseguró Sánchez durante el desayuno informativo organizado por el Grupo Joly y el Banco Santander que se celebró ayer en el Hotel Nazaríes de Granada.

Sánchez defendió la productividad que reciben los directivos y el personal, calificada de "derroche" en tiempos de crisis por sindicatos y oposición. "La productividad es parte del salario de los sanitarios. No puede desaparecer. Despilfarro a estas alturas aseguro que no hay", garantizó.

Además del apoyo al personal, la consejera dijo que no se va a dejar de mejorar la cartera de servicios y las infraestructuras sanitarias. Sánchez garantizó que se seguirá con la atención a inmigrantes y con la gratuidad y universalidad del sistema sanitario. Sobre los centros, la consejera dijo que no se han dejado de abrir nuevos centros de Salud, más de 140 en Andalucía para mejorar la atención a los ciudadanos. Además, se continúa con el proyecto de mejora de las Urgencias que incluye una reducción del tiempo de atención de los pacientes y un refuerzo de personal en los periodos de alta frecuentación.

Todo, secundado con el avance de la investigación sanitaria, los trasplantes -que sitúan a Andalucía a la cabeza nacional- o nuevas técnicas quirúrgicas.