Andalucía

La crisis económica, una invitada más al congreso del PSOE-A en Granada

  • El secretario de Organización socialista, Luis Pizarro, afirma que la solución a la situación desfavorable "no está en manos" de la Junta de Andalucía, pero asegura que se apostará por las políticas sociales

La crisis económica se ha colado también en la ponencia marco del XI Congreso Regional del PSOE de Andalucía. El secretario de Organización de los socialistas andaluces, Luis Pizarro, avanzó ayer que en el debate que se entable en las entrañas del Palacio de Congresos tendrán su hueco las propuestas relacionadas con la "situación económica negativa". "Crisis, si ustedes prefieren", apostilló Pizarro.

La óptica desde la que se afrontará esa situación peliaguda para "empresarios, trabajadores y las economías domésticas" será la de que "la solución no está en nuestras manos", aunque sí se pueden poner en marcha "recetas que palien la situación económica". Por ello, el secretario de Organización del PSOE-A defendió que, entre las medidas que la Junta de Andalucía puede poner en marcha, destaca la de unos presupuestos que "sin ser expansivos", sí "seguir manteniendo la producción mediante recursos de inversión pública en vivienda o suelo productivo" con el fin de hacer especial hincapié en la construcción, "uno de los sectores que más sufren".

Asimismo, Pizarro afirmó que la Junta hará una "apuesta fuerte" en las próximas cuentas autonómicas por la defensa de las "medidas sociales" y los servicios públicos como la educación y la sanidad. "Los recursos en los presupuestos tienen que ir destinados a mantener las políticas sociales" al mismo nivel de cuando la economía era boyante. En contraposición a cuando una "situación de crisis la gestiona la derecha, con medidas que recortan las medidas sociales".

Pero la ponencia marco -que ha recibido 1.028 alegaciones que se debatirán durante la jornada de hoy y hasta mañana- no versará únicamente sobre la crisis económica, sino también sobre "nuestra idea clara de Andalucía, que fue lo primero para nosotros en 1982 y lo sigue siendo en 2008". Más de un cuarto de siglo después, "estamos dispuestos a no morir de éxito", según Pizarro, por lo que el Congreso debe servir para "leer e interpretar bien qué quieren los ciudadanos de un partido como el nuestro".

El debate sobre las enmiendas a la ponencia, sin embargo, serán sólo una fase del Congreso Regional socialista que contará, entre otros, con la presencia mañana sábado del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y otros pesos pesados en el organigrama socialista federal, como el vicesecretario general, José Blanco, y la secretaria de Organización, Leire Pajín.

La primera parte del cónclave estará destinada al "debate y la crítica sobre la gestión de la ejecutiva actual" y a la evaluación que realizarán de la ejecución de su programa los casi 700 delegados. Eso sí, el secretario de Organización del PSOE-A aseguró ayer que "llegamos al Congreso con los deberes hechos". Primero, por el cumplimiento de una de las promesas estrella de los socialistas, la reforma del estatuto de autonomía que "ya tiene una repercusión positiva en materia de financiación y en leyes importantes". Y segundo, con la victoria en las pasadas elecciones autonómicas.

El domingo será el momento en que Manuel Chaves, releegido previamente como secretario general del PSOE andaluz, haga pública la nueva ejecutiva regional. Pizarro se escudó en que "soy uno de los clásicos" para no adelantar ni acontecimientos ni nombres. "Pero siempre hay cambios en la dirección", afirmó.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios