Andalucía

PP e IU se desmarcan del sí de Andalucía al nuevo modelo de financiación

  • La oposición acusa a Griñán de plegarse a los intereses de Zapatero para "beneficiar" a Cataluña · La Junta, satisfecha con una propuesta del Gobierno que está "por encima de nuestras expectativas"

18,77%

La resaca de la presentación del nuevo modelo de financiación autonómica el domingo por parte del Gobierno dejó ayer la evidencia de que el debate está lejos de desaparecer del escenario político. No hubo acuerdo entre la Junta y los partidos de la oposición para consensuar un sí al nuevo modelo el próximo miércoles en la convocatoria del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), con muestras de que, si alguna vez pareció haber coincidencias, éstas se encuentran ahora en las antípodas, más aún tras conocerse los números que acompañarán al sistema.

La satisfacción glosó las declaraciones de los representantes de la Junta, imbuidos en una sensación cercana a la euforia, que por exceso pareció a veces impostada.

Fue Carmen Martínez Aguayo, consejera andaluza de Economía y mano derecha del presidente de la Junta en la negociación, quien dio a conocer en rueda de prensa matutina los "logros y avances" del modelo que sustenta la posición favorable de Andalucía a su aprobación, prevista para otoño.

No sólo la cifra de 3.133 millones de euros para la comunidad fue motivo de satisfacción para Martínez Aguayo. También que, de los 11.000 millones de euros de fondos adicionales, la comunidad reciba "cifras muy por encima de nuestras expectativas", 1.795 millones en 2012 -progresivamente desde 1.008 en 2009, 1.445 en 2010 y 1.662 en 2011- y la resolución de dos "litigios" importantes con el Estado que contribuyen a redondear la cifra: sobre el traspaso de competencias del Guadalquivir y la participación de la gestión de los metros.

La consejera, después de estudiar la propuesta, aportó otras consecuencias del modelo en Andalucía. La comunidad pasa a recibir del 18,4% en el anterior modelo aal 18,77% por su población ponderada y, en financiación por habitante, queda"unas décimas por encima de la media". Aseguró que "ni subirán ni bajarán los impuestos".

El deseo de Martínez Aguayo de que PP e IU apoyasen el sistema en un pleno extraordinario convocado por la tarde para fijar la posición andaluza se evaporó al dar inicio la sesión. Martínez Aguayo, protagonista de la atención mediática y respaldada por José Antonio Griñán, sólo recibió las felicitaciones de los suyos. La consejera subió hasta tres veces a la tribuna para exponer los detalles del modelo y no se esforzó en las invitaciones a un acuerdo común que, de antemano, los líderes políticos de la oposición ya habían negado.

En la última intervención para cerrar el debate respondió a Javier Arenas, presidente del PP-A, que tomó la palabra en el segundo turno para fijar la posición de su partido, compartida con IU pero con palabras mayores: "Es la única persona que piensa que el modelo responde a su propuesta, cuando todo el mundo piensa que el ganador es el tripartito; ha ganado el soberanista de ERC".

Los populares dan como vencedor a Cataluña, que gana más de 3.800 millones de los fondos adicionales por los 1.795 millones de Andalucía, ya que consideran "inversión y no financiación" las alusiones al Guadalquivir o a los metros. "Nos han mentido, dijeron que íbamos a ser los que más recibiéramos", acusó Arenas directamente a Griñán, para calificarle de "copiloto en este festival de la insolidaridad". Para Arenas, Griñán se ha plegado a los intereses de Zapatero y "se ha dejado influir más por los 300.000 votos de ERC que por los dos millones y medio que votaron a los socialistas a Andalucía o los ocho millones de andaluces".

En la diferenciación popular de choque de dos frentes, el Estatuto catalán y el andaluz, con el consiguiente "agravio" a Andalucía, abundó anteriormente en su posicionamiento el diputado de IU Pedro Vaquero. Para IU, el modelo es rechazable por su "insolidaridad y discriminación" con respecto a Cataluña. "La negociación huele a pantumaca", ejemplificó Vaquero para sumar el no de IU a un sistema "con el que se pierde peso político".

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