Diputado, parlamentario andaluz, secretario general de CCOO de Granada, militante del Partido Comunista de Andalucía y de Izquierda Unida. Pese a su extensión, el currículum político de Pedro Vaquero no es suficiente para reflejar la importancia de su figura, ni su compromiso permanente con los trabajadores, con Granada y con Andalucía. La "voz más lúcida de la izquierda granadina" se apagó ayer a los 69 años como consecuencia del cáncer que le fue diagnosticado en 2011 y deja "huérfanas" a las organizaciones políticas en las que trabajó durante su vida, que consagró en buena medida a la lucha por la autonomía de Andalucía y por la clase trabajadora.

"Nos deja un político de altura y, sobre todo, un hombre que vivió coherente a los valores de solidaridad, tolerancia y justicia social que siempre defendió en la calle y en las instituciones". IU y el Partido Comunista de Andalucía se despidieron así de uno de sus militantes más insignes, que pese a haber nacido en Valladolid sintió Andalucía como suya. Licenciado en Derecho por la Universidad de Granada y en Filosofía por la Universidad Pontificia de Comillas,

CCOO lo calificó ayer como "referente de la izquierda, del movimiento sindical e imprescindible en el diálogo político", al que dedicó su vida "desde todos los frentes y hasta sus últimos días" poniéndose como referencia la lucha por la justicia social y en defensa de los más desfavorecidos.

Vaquero fue diputado de IU por Granada en Cortes Generales desde 1996 hasta el 2000 y portavoz económico en el Parlamento de Andalucía de 2004 a 2012. En la Cámara autonómica fue una de las voces más autorizadas y respetadas en materia económica y de empleo, por su vinculación con el sindicalismo de clase. En el Congreso de los Diputados Vaquero fue portavoz en la Comisión de Política Social y Empleo, y portavoz de Función Pública en la Comisión de Administraciones Públicas.

El coordinador general de IU, Antonio Maíllo, lo definió ayer como "uno de los representantes de la mejor tradición del Partido Comunista y de IU en Andalucía". "Esta vez no ha podido ser, pero no por esperada deja de ser dolorosa" su pérdida, ya que como en tantas otras ocasiones se esperaba que pudiera haber resistido y vencido a la enfermedad.