Los conservacionistas han secundado en un comunicado remitido a Efe las protestas de científicos y empresas de avistamiento de cetáceos, que aseguran que durante la semana pasada se han realizado "prácticas bélicas de alto impacto".

Verdemar ha asegurado que las prácticas se han realizado en una zona catalogada como reserva de la biosfera, con un alto valor en la conservación mundial de cetáceos.

Según los denunciantes, las maniobras se efectuaron durante los días 8 y 9 de mayo de 2008, unas acciones que han asegurado que vulneran normativas como el Real Decreto de Protección de Cetáceos, que recientemente ha entrado en vigor o la Ley de la Biodiversidad y Patrimonio Natura.

Calderones comunes, delfines mulares, comunes, listados, cachalotes y la única población de orcas del sur de Europa son especies que residen o pasan temporadas en el Estrecho de Gibraltar y, muchas de ellas, con sus crías recién nacidas.

El catálogo elaborado por el grupo de Conservación, Información y Estudio sobre los Cetáceos (Circe) cifraba en 260 los ejemplares de calderones de la zona el pasado verano, así como 33 orcas, de las cuales 18 se mueven en dos grupos por el centro del Estrecho y las restantes en el área próxima a Barbate.

Verdemar Ecologistas en Acción añade que las maniobras militares no sólo podrían afectar a las poblaciones de cetáceos, sino también perjudicar al tejido empresarial asentado en Tarifa dedicado al avistamiento cetáceos y al funcionamiento de las pesquerías, debido al impacto de ondas sonoras.