Andalucía

Arrancaron los dientes a mujeres rumanas para obligarlas a prostituirse

  • Guardia Civil y Policía Nacional detuvieron a cuatro miembros de la organización

Una operación conjunta de la Guardia Civil y la Policía Nacional desarrollada en las localidades de Níjar y Roquetas consiguió detener a cuatro miembros de una banda que obligaba a mujeres rumanas a prostituirse mediante coacciones y violencia física, y que llegaron a arrancar a una de sus víctimas un diente con unos alicates.

Los cuatro arrestos se produjeron el pasado día 6 en el marco de la operación Ecija-56, iniciada después de que en abril dos ciudadanas rumanas que ejercen la prostitución denunciasen ante la Guardia Civil que habían sido víctimas de coacciones y amenazas por parte de un grupo de compatriotas con el fin de que trabajasen para ellos.

Tras la denuncia, los componentes de este grupo irrumpieron en el domicilio de las dos mujeres, a las que retuvieron contra su voluntad, agredieron sexualmente, golpearon con bates de béisbol, además de arrancar un diente a una de ellas con unos alicates para, finalmente, sustraerles todas sus pertenencias, entre ellas un vehículo. Los investigadores recibieron a finales de mayo una nueva denuncia interpuesta también por una ciudadana rumana a la que tres compatriotas sustrajeron 250 euros.

Al comprobar que un mismo individuo estaba implicado en ambos hechos, los dos cuerpos de seguridad decidieron coordinar sus investigaciones de manera que, el pasado 6 de junio, se logró la detención en Níjar y Roquetas de Cosmin M., de 31 años; Catalin I., de 31; Adrian Cristian G., de 25, y Renato M., de 42 años.

Los agentes encargados de esta operación dedujeron que la banda centraba su actividad en captar a mujeres que ejercían la prostitución y que no contaban con el respaldo de ninguna otra organización, para obligarlas a trabajar para ellos bajo amenazas y violencia física.

En el caso de aquellas víctimas que dependían de grupos rivales, los miembros más violentos de la banda les atacaban y neutralizaban irrumpiendo en sus lugares de reunión para retenerles, robarles y extorsionarles.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios